El nuevo agro: un futuro que ya pisó la tierra

Digitalización, tokenización, bioinsumos, sustentabilidad. La agricultura del futuro ya es cosa del presente. Muy incipiente en ciertas cuestiones, con un mayor grado de avance en otras, lo cierto es que hay una nueva forma de producir tranqueras adentro y también de gestionar y comercializar tranqueras afuera del campo. Optimizar rendimientos siempre es el objetivo de máxima en los planteos agropecuarios y el uso de los datos que se generan hace posible un salto cuantitativo pero ahora también entra a pisar fuerte en la ecuación el plus que se puede lograr con los bioinsumos y el agregado de valor a la producción. Además, el salto al mundo de las finanzas descentralizadas (Defi) al momento de comercializar la cosecha también promete sumar rentabilidad.

En el marco de Expoagro 2022 se pudieron observar algunas tendencias. Alejandro Saavedra, coordinador del proyecto de Agregado de Valor del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta), señaló que la agrobiotecnología ahora es la mirada del instituto y de esa forma resumió el camino a seguir. “No es sólo producir granos, como país tenemos que avanzar en industrializar la materia prima que producimos”, resaltó al tiempo que consideró que fue un error haber sostenido discursivamente años atrás que sólo era importante el grano.

También apuntó que “hay nichos para productos con poco marketing, productos con proteína”. Es que no todo es carne y soja sino que las legumbres empiezan a aparecer con fuerza. “Tenemos que mirar la demanda y prepararnos para los nuevos productos y procesos. Todo lo que es legumbres, cadena de maíz, tenemos que innovar. Como institución de ciencia e investigación tenemos que prepararnos para determinados procesos, que puede ser que la industria no tenga, tenemos que incentivarlos”, subrayó Saavedra para quien hay que completar el camino trasmitiéndole a los funcionarios las nuevas necesidades para que se puedan “acomodar certificaciones, permisos, códigos, inscripción de nuevos productos”.

Insumos biológicos
El nuevo camino que emprende la agricultura llega con una fuerte apuesta de los bioinsumos. Adrián Rovetto, vicepresidente Terragene y cofundador de Protergium, habló sobre la nueva forma de producir alimentos “cada vez menos agresiva y menos destructiva”, destacó que esta tendencia está impulsada por una cultura más verde que viene de Europa y que paulatinamente se aplica en los países americanos y vaticinó que en los próximos “3 a 10 años va haber una explosión” liderada por Brasil en el cono Sur.

“No creamos que Estados Unidos es el que lidera esta revolución, sino que la lideran Francia, Alemania, Italia, España, Austria. Llamativamente el país que más adaptación está teniendo a bioinsumos y tecnologías verdes es Brasil. Ellos están teniendo un crecimiento interanual de entre un 16 y 18%, mientras que en Argentina está en alrededor del 10% y mundialmente hay una tasa promedio de 14 ó 15%”, puntualizó el máximo referente de Proterium, la división agro de Terragene enfocada en los bioinsumos.

Electrónica. La maquinaria agrícola ya no es puro fierro. La “inteligencia” se metió en los equipos.
Electrónica. La maquinaria agrícola ya no es puro fierro. La “inteligencia” se metió en los equipos.

Sebastián Suárez Meccia / La Capital
Rovetto advirtió que “año tras años se van volviendo más sólidos los datos y el mundo se está dando cuenta de que la forma de producir alimentos que viene de la posguerra mundial, que era una agricultura química, se está transformando en una agricultura biológica y más sustentable”.

“Los biológicos no hacen milagros pero a medida de que evoluciona el concepto de cuidar el suelo y la microbiologia del suelo y los nutrientes que tenemos en el suelo y se pasa a no hacer una agricultura meramente extractiva se van profesionalizando las tecnologías biológicas y son más eficientes”, resaltó y mencionó que por ejemplo uno de los productos de Protergium que controla nematodos en suelo está teniendo más de un 90% de control de nematodos en la raíz del cultivo, mientras que el mejor de los químicos está en un 70 ó 75%.

El camino de investigación y desarrollo recorrido está demostrando sus resultados. Rovetto subrayó que “la tecnología biológica ya supera a la tecnología química”.

“Cuando la tecnología biológica se vaya profesionalizando más, nos vamos a encontrar con tasas de aceptación del productor cada vez mayores. El productor quiere ver resultados, no se conforma con que lo que está colocando sea sustentable. Cuando vea que las soluciones son reales vamos a poder tener una agricultura cada vez más verde”, enfatizó y resaltó que “la profesionalización de los procesos productivos biotecnológicos que estamos utilizando son fundamentales en mantener un costo racional” ya que “la ecuación tiene que cerrar, tiene que ser competitivo” y por eso “es un desafío en el proceso productivo bajar costos”.

Protergium apoya su red comercial en las compañías multinacionales “que están entendiendo que hay que producir un cambio y migrar a una agricultura biológica”. Rovetto apuntó que tienen mucha receptividad de las grandes que quieren probar los productos biológicos y no sólo en Argentina. “Estamos probando productos en México, Estados Unidos, Alemania y vamos a empezar algunas pruebas en Colombia, Perú. También estamos registrando y probando productos en Brasil. Además estamos trabajando en los registros para enviar muestras a Reino Unido. Lo estamos encarando no sólo pensando en una redistribución local, sino que mucho más valor le podemos dar al producto comercializando a nivel internacional”, detalló.

Emprendedores. La innovación marca el rumbo agropecuario.
Emprendedores. La innovación marca el rumbo agropecuario.

Sebastián Suárez Meccia / La Capital
La idea de la empresa es validar el producto para el registro en otros sistemas. El campo de Brasil no tiene las mismas condiciones medioambientales ni de flora ni de fauna que el campo de la Pampa Húmeda o los campos de producción de tomate en México son muy diferentes al cinturón verde de La Plata o Córdoba. “Estamos haciendo pruebas, el desafío de los biológicos es que sea un producto que funciona en laboratorio, en el campo Argentino y en cualquier parte del mundo”, subrayó el co fundador de la firma.

Inversión
Protergium inaugurará a mediados de este año su planta ubicada en el microparque industrial de Alvear donde funciona la empresa madre, en la que producirá bioinsumos para distintos cultivos, con una capacidad de 50 mil litros mensuales, y posibilidad de expandirse a 300 mil litros por mes, para la que realizó un desembolso inicial de u$s 10 millones.

“La planta ya tiene el núcleo productivo listo, estamos automatizando el proceso. Ya estamos probando los primeros lotes de producción. Estamos largando lo primeros lotes de biofertilizantes y bioestimulante para trigo. Encaramos un proceso de automatismo, para bajar costos. La planta puede producir 40 mil litros por mes y tiene una capacidad de rápido escalado a 300 mil litros agregando módulos de fermentación”, detalló Rovetto sobre la planta que producirá biológicos “para resolver una problemática real, con una mejora del rinde y la salud del cultivo”.

La digitalización
La transformación digital del campo llega de la mano de plataformas que acompañan al productor agropecuario a mejorar sus planteos en este nuevo escenario en el que “se pasó del papel a la pantalla”.

Gracias al perfil innovador del hombre de campo argentino es posible esta nueva agricultura. Luis Silva, lider de Ventas de Bayer para Cono Sur, contó de qué se trata FieldView, la plataforma de agricultura digital de la compañía que permite recopilar y procesar datos a campo para ayudar a evaluar la performance de cada lote de la mano de una práctica agrícola eficiente y sustentable y también habló sobre las tendencias del nuevo agro.

“El futuro viene de la mano de más digitalización, de la comercialización desde ámbitos digitales también, desde e-commerce, y una de las ventajas que también tiene Field View es desde el lado de la sustentabilidad, empezar a contar una historia distinta y hacer negocios diferentes desde la sustentabilidad y para eso está la necesidad de los datos.

«Como agro tenemos que comunicar lo que hacemos de manera distinta, es decir mostrarlo en una pantalla y demostrar el impacto que tiene”, dijo Silva y planteó que “la agricultura digital tiene valor si genera algo que vale, pero la demanda la tiene el consumidor”.

Field View viene a atraer otra lógica al agro, básicamente es la digitalización del agro. Silva explicó de qué se trata: “Como plataforma creemos que podemos traer algo diferente, que es poder ver en una pantalla lo que ocurre en el campo, gestionar mejor mis tareas y costos, mucho mejor los rendimientos. Ese combo más la plataforma hacen algo muy interesante en lo que se viene para adelante en agricultura digital”.

En ese sentido, Silva apuntó que el verdadero valor de la agricultura digital está “en todos los datos que se generan a partir de las siembras, las pulverizaciones, las cosechas, las tareas que hacemos en el campo”. Además, agregó que Field View Plus es la licencia con kit de montaje, una pantalla que permite visualizar esos datos y la conectividad a la cosechadora con dato de rendimiento, sembradora con dato de variabilidad de siembra. “Ahí empieza a correr la magia. Esos datos se empiezan a mirar y ver si hice bien o mal, tuve tal cosecha, tal rendimiento”, subrayó.

“Hoy se pasó del papel a la pantalla, de la cabeza a la pantalla. En este punto tal vez haya un poco de trabajo después de cosecha, pero lo que queremos hacer desde Field View es tomar cada vez más decisiones anticipadas, corregir en el momento, y buscarle la vuelta para que los datos fluyan de manera más dinámica. Para eso neceitamos conectarnos con otras compañías, de maquinaria, con otras aplicaciones que brinden ese soporte y con la conectividad en el campo, que estamos haciendo un trabajo interesante para conectarnos. Este camino del papel a la pantalla, y del trabajo de autopsia al anticipado tiene que cobrar valor”, resaltó Silva.

Tokenización de los granos
La actividad agropecuaria también se mete de lleno en las finanzas descentralizadas, en una nueva forma de comercializar los granos. Eduardo Novillo Astrada, CEO y co founder de Agrotoken, planteó que “el agro se está digitalizando” y dijo que “va hacia una transformación digital muy importante y sobre todo tranqueras para afuera” que es donde se enfoca la firma que transforma granos en un activo digital, para guardar o intercambiar por insumos, servicios y otros activos. “Es una tecnología nueva que llegó para quedarse y para simplificarle la vida”, precisó.

Sobre la base de que “siempre el productor adoptó la tecnología de una forma muy rápida tranqueras para adentro, aunque le costó un poco tranqueras para afuera”, desde Agrotoken tomaron las riendas de un camino “muy disruptivo pero también muy beneficioso” para el cliente.

“El productor siempre quiere estar parado en grano, no pesificarse, nosotros le damos esa oportunidad de estar en grano, en lugar de tenerlo en silobolsa o un acopio tenerlo en un teléfono con una liquidez inmediata”, contó Novillo Astrada.

En ese sentido, indicó que la ventaja que tiene el productor que opera con Agrotoken es que puede gastar el grano en el momento que quiera, y donde quiera. La otra ventaja es que lo puede usar como garantía para préstamos, como un activo financiero. “Se le abre un mundo que antes no tenía. Tiene una forma de resguardo seguro de su grano, esto es blockchain, es confianza y seguridad. Estamos emponderando al productor y se le abre una abanico de opciones de sacar un mejor precio y más rédito de su producción”, subrayó.

Respecto a utilizar los token como garantía para un préstamo, Novillo Astrada precisó que el productor “ya no va a tener que ir con una carpeta enorme a presentar al banco con los activos que tiene, si tiene campo, casa o hipotecar, todo lo que tenía que hacer antes”. En cambio, ahora en lugar de tener los granos en el campo en un silobolsa, lo entrega a un acopio, lo tokeniza y va y lo deja en garantía y toma el préstamo. “Al final del préstamo paga en pesos porque vendió vacas o el trigo y recupera su grano, siempre está en grano. Esa es una de las grandes ventajas que tenemos. También le damos una tarjeta de crédito para que pueda gastar en cualquier momento y en cualquier lugar del mundo y que eso esté prefondeado por granos. Y después va a tener la opción, pago con pesos o con granos”, explicó.

Para Novillo Astrada en el futuro va haber muchos beneficios financieros, ya que se trata de un activo que puede tener un rendimiento económico.

Este nuevo mundo de tokens y activos digitales puede parecer extraño para el productor agropecuario. Por eso desde Agrotoken están incentivando a probar de qué se trata. “Hicimos una alianza con todo el ecosistema y damos descuentos para que el productor pruebe. Una vez que prueba el productor no vuelve. El otro día me encontré con un productor que usó por primera vez Mercado Pago y entendió como manejarse. Esto es igual, el productor va a probar y va a ver que es tan simple que no va haber vuelta atrás. Los invitamos que se anime a probar, es una tecnología nueva que llegó para quedarse y para simplificarle la vida. Ya no tiene que pedirle más permiso al banco o al acopio para ver qué puede hacer con su mercadería, o en que momento. El tiene tokens en el teléfono y un día necesita $ 1.000, $10.000 ó $ 100.000 y con un clik hace convertir y convierte sus granos a pesos y automáticamente tiene el dinero en su cuenta del banco. Es una ventaja que antes no tenía”, resaltó.

El co fundador de Agrotoken consideró que la próxima generación de productores va a ser la que lleve las finanzas descentralizadas a su máxima expresión: “Serán los que ya crecieron con crypto y finanzas descentralizadas. No falta mucho, 5 ó 10 años es mañana. Va haber un cambio en todo el mundo sobre este tema. Es una movida que ya está pasando, no tiene freno”

Por Patricia Martino pmartino@lacapital.com.ar – Agroclave