El agro, importante para el Tesoro, intrascendente para el Congreso nacional

El sector agroindustrial argentino tuvo un año pasado escaso protagonismo en el Congreso a la Nación. El desempeño contrastó con el protagonismo que la actividad tuvo en la generación de divisas, donde con un aporte de 32.807 millones de dólares, la mayor cifra en lo que va del siglo.

Según la Fundación Barbechando, la entidad que desde 2008 sigue el funcionamiento del Congreso nacional en los temas pertinentes al agro, el sector agrobioIndustrial (ABI) no llegó a tener la sanción ni del 12% de los proyectos de ley en agenda del Congreso Nacional.

De ellos, 14 fueron leyes –9 de ellas esperan sanción definitiva– y 8 dictámenes de comisión que ya perdieron vigencia.

Con respecto a la autoría de los proyectos: el 95% fueron impulsados por el oficialismo, donde los diputados y senadores del Frente de Todos tienen más del 70% de las iniciativas y más de un 20% del Poder Ejecutivo; mientras la oposición corre por detrás con menos del 5% de los proyectos dictaminados.

“Durante el 2021, el Congreso sesionó menos de la mitad de veces que el año anterior, y ese resultado se replica en cada Cámara en particular: en Diputados fueron 5 sesiones contra 12 de 2020 y en Senado 11 contra 21″, destaca la Fundación.

En cuanto a los temas vinculados con el sector, más del 30% de la agenda de los proyectos con algún grado de avance estuvieron vinculados al ambiente -ley de educación ambiental, reciclado de neumáticos, evaluación de impacto ambiental y principios ambientales, entre otros-; mientras que el 13% fueron para créditos para agricultores familiares e igual número para economías regionales.

“Luego hay un 10% de las leyes y/o dictámenes vinculados al aumento de impuestos, modificaciones a los bienes personales y ganancias de las empresas; ganadería, Ley Ovina-, infraestructura, Bicameral de la hidrovía; y energía, Ley de Biocombustibles-, entre otros temas, que en su gran mayoría significaron un perjuicio para el sector”, admite el informe.

La baja en la actividad legislativa a nivel recinto se refleja en la baja en la actividad en comisiones, producto de un Congreso en vilo por las elecciones de medio término.

El año pasado, ninguna de las seis comisiones que siguen de cerca los temas de la ABI- Agricultura y Ganadería, Ambiente y Economías regionales- lograron mejorar su performance respecto del año anterior, e incluso la mitad de ellas estuvieron por debajo de la media de 2020.

TERMÓMETRO
Según el balance legislativo de la fundación, la ABI representa un 10% de la mesa de entradas del Congreso, con 237 iniciativas sobre 2403 del total.

“Una vez más, los proyectos ambientales están al tope de la agenda legislativa, reflejando un cuarto de todos los proyectos presentados en el 2021 vinculados a la ABI, donde la creación de áreas protegidas o reservas, los delitos penales ambientales y el desarrollo sostenible son tendencia. Bosques, cambio climático, recursos hídricos y evaluación de impacto ambiental, los siguen detrás”, destaca el informe.

Casi un 20% de los proyectos presentados están vinculados a las economías regionales, con preponderancia de proyectos que impulsan la emergencia hídrica y beneficios para la vid y olivas.

Luego, un 10% aproximado se llevan los proyectos de ganadería y también los de agricultura, donde, para los primeros, el maltrato animal representa casi el 70% de las iniciativas. Para el segundo caso, maquinarias, agroecología, agroquímicos, agricultura familiar y granos representan la mayor cantidad de las iniciativas.

Con respecto a las autorías de los proyectos presentados de la ABI, el Frente de Todos y Juntos por el Cambio están parejos, con un 44% y 39%, respectivamente, de iniciativas propias.

Al interior del interbloque de Juntos por el Cambio, 53% de las iniciativas corresponden a la UCR; 42% al PRO y 5% a la Coalición Cívica. Luego le siguen otros partidos de terceras vías, con el 8% y casi un 7% de los bloques federales o partidos provinciales. El Poder Ejecutivo tiene casi un 2% de las iniciativas impulsadas que aún no lograron ningún grado de tratamiento

– La Voz del Interior