Neuquén y Chile estrechan los lazos para aprovechar el potencial de Vaca Muerta en plena transición energética. Los ductos de transporte son claves.
Los abundantes recursos de Vaca Muerta, sobre todo en materia gasífera, obligan a generar la apertura de nuevos mercados donde colocar la producción. Desde 2018, Neuquén volvió a exportar gas a Chile, pero aún hay un camino era recorrer para generar lazos comerciales de confianza ante un nuevo escenario energético.
En los últimos años se comenzó a forjar una nueva relación binacional tras más de una década de interrumpidas las ventas de gas desde la Argentina al país vecino para atender las necesidades domésticas por cuando declinaron los yacimientos convencionales.
La evolución del desarrollo de Vaca Muerta y la necesidad de Chile de descarbonizar su matriz energética, abren otro panorama. Así quedó claro durante el Encuentro Internacional Araucanía-Neuquén que se llevó a cabo de forma virtual esta semana.
“Chile está queriendo recorrer el camino hacia las energías verdes y claramente el gas puede convertirse en una solución para reemplazar el carbón, que sigue consumiendo y mucho, por fuentes menos contaminantes como el gas”, explicó el ministro de Producción e Industria de Neuquén, Facundo López Raggi.
“Lo que está claro es que Vaca Muerta, después de la pandemia, rápidamente ha salido con mucha fuerza y está mostrando niveles de eficiencia y competitividad que avizoran que si no encontramos salida para nuestro gas, la producción va a tener un techo cercano”, agregó.
En 2018, ante el crecimiento del shale gas, se retomaron las exportaciones hacia Chile de forma interrumpible. A partir de la primavera de 2021, y mediante el Plan Gas.Ar, se comenzaron a cerrar contratos en firme.
El subsecretario de Hidrocarburos de Neuquén, Gabriel López, señaló que “hoy estamos produciendo Vaca Muerta para cumplir con la demanda local, estamos en una etapa muy incipiente del desarrollo”, pero los recursos la roca generadora son tan grandes que permitirán incrementar ampliamente las exportaciones.
“En relación a la potencialidad de Vaca Muerta, diría que tenemos una escasa posibilidad de transporte de hidrocarburos entre ambos países. Es un tema que es estratégico. En una mirada a largo plazo, debería estar pensándose en la posibilidad de ampliación”, indicó López sobre los gasoductos Pacífico y Gas Andes y el oleoducto Otasa.
El oleoducto comunica el yacimiento neuquino Puerto Hernández con la refinería chilena de Río Río. Se planea realizar una conexión directa con el Puerto de Talcahuano para que el petróleo de Vaca Muerta tenga salida directa al Pacífico, hacia los mercados asiáticos y la costa Oeste de los Estados Unidos.
La empresa Oldelval está llevando a cabo las tareas de revisión de integridad del ducto, y se estima que estaría operativo para el año próximo. Además se deben realizar obras en el tramo de Chile.
Mientras que los gasoductos están operativos. El Gasoducto del Pacífico fue planificado para enviar producción de Loma La Lata a Concepción, y tiene una capacidad de 2,5 millones de m3 diarios (MMm3d). Hoy es bidireccional y exporta gas desde El Portón y se utiliza para transportar gas desde otras áreas hacia el anillo de Loma La Lata.
Gas Andes, con una capacidad de 10,8 MMm3d, está diseñado para exportar gas desde la Cuenca Neuquina y une el bloque La Mora, en Mendoza, con la capital chilena, Santiago.
Entre la serie de obras de transporte que impulsa el gobierno argentino, se encuentra la ampliación del Gasoducto Centro Oeste, que permitiría no sólo aprovechar la capacidad de transporte en la ruta Neuquén-Cuyo, sino que también abriría la posibilidad de ampliar exportaciones hacia Chile por Gas Andes.
Entre las líneas de trabajo entre ambos países, el subsecretario de Hidrocarburos neuquino enumeró los siguientes ejes:
-Mejorar los condiciones de abastecimiento de gas con contratos en firme, que le permitirán a Chile disminuir su exposición a los vaivenes internacionales del GNL.
-Un mayor desarrollo del mercado del gas en Chile. Hoy se puede destinar el gas a industrias y generación eléctrica, pero es necesario desarrollar la infraestructura necesaria para que crezca el consumo en el sector residencial.
-El gas de Vaca Muerta puede ayudar a Chile a descarbonizar su matriz energética complementándose con la intermitencia de las fuentes renovables que impulsa el país vecino
Por Cristian Navazo – La Mañana de Neuquén / Más Energía