Congreso de Aapresid: qué hacen las provincias para fomentar sistemas “siempre verdes”

Funcionarios de Entre Ríos, Córdoba, Santa Fe, La Pampa y Buenos Aires expusieron los programas que implementan para mejorar la sustentabilidad y la conservación del suelo

En el congreso anual de Aapresid, funcionarios provinciales destacaron las políticas públicas en las que están trabajando para implementar prácticas más conservacionistas

En el Congreso de Aapresid “Siempre vivo, siempre diverso”, se invitó a que las provincias puedan exhibir cuáles son las acciones que están llevando adelante para favorecer la sustentabilidad y la conservación del suelo.

Juan José Bahillo, ministro de Producción de Entre Ríos, dijo que en ese territorio “el 65% del suelo ha tenido un flagelo ambiental importante, con erosión que es consecuencia, entre otras cosas, de prácticas no conservacionistas”.

En este sentido, comentó que desde hace más de 50 años que el INTA y su cartera, durante los distintos gobiernos, están trabajando en la generación de políticas de incentivo, como ser beneficios impositivos, para implementar prácticas más conservacionistas. “Los productores tiene un grado de concientización de cuidado del suelo muy importante”, reconoció.

“De un millón setecientas mil hectáreas cultivables, que pueden ser más de dos millones con el doble cultivo, hay unas seiscientas mil con prácticas conservacionistas. Hay también una demanda social generalizada en tal sentido”, aseguró.

En este contexto y para contribuir a ello, detalló que el gobierno provincial implementó el programa PASE (Productor Agropecuario Sustentable Entrerriano), para incentivar rotación de cultivos con un seguimiento por medio de análisis del suelo. Acerca de la desgravación impositiva a los fertilizantes, abogó para que “además del IVA pueda añadirse una reducción en el Impuesto a las Ganancias”.

Por su parte, Sergio Busso, ministro de Agricultura de Córdoba, comentó que en su provincia se trabaja con las Buenas Prácticas Agropecuarias (BPA), con un programa específico para trabajar en la conservación de suelo.

“La geografía de Córdoba es de plano inclinado (de 700 a 100 metros) que afecta a las ocho millones de hectáreas productivas. Hay 250 micro embalses y trabajamos de manera conjunta con los productores en la conservación de suelos, a través de consorcios de conservación, camineros y canaleros y próximamente con un sistema integrado de cuencas”, detalló.

“Hay un cambio cultural en los productores”, valoró. El funcionario dejó una frase atribuida a un productor cordobés: “Si no sabemos conservar el suelo y el agua, a las próximas generaciones no le vamos a dejar una tierra para producir sino simplemente una escritura de dominio”.

Para Busso, “la conservación del suelo, en Córdoba, es una política pública”, destacando que han establecido que el propietario tiene la obligación de forestar el 2% de su superficie. Asimismo, se manifestó crítico de “la naturalización de las retenciones”, instando a que el Gobierno devuelva ese aporte en incentivos y estímulos como reconocimiento al esfuerzo que hacen los productores.

A su turno, María Eugenia Carrizo, subsecretaria de Coordinación Agroalimentaria de Santa Fe, contó que trabajan de manera conjunta con las universidades e institutos de formación, el INTA y el Colegio de Ingenieros Agrónomos (Ciasfe), para acompañar a los productores en el financiamiento para el estudio de distintas alternativas de cultivos y la reutilización de desechos pecuarios.

Por otro lado, señaló que su provincia tiene una ley (10.552) de conservación y manejo de suelos, de carácter voluntario para los productores y todos los que adhieren y presenten planes de manejo de suelo, se benefician con una exención impositiva.

“Para contribuir a un mayor nivel de adhesión se creó el Observatorio Santafesino de Suelos, generando un espacio científico tecnológico que impulsa y da cierta modernidad a la ley mediante una plataforma digital donde los productores puedan cargar los planes de manejo y conservación”, describió.

Carrizo sostuvo que están iniciando unos talleres de sensibilización de los productores para explicar los alcances de la ley. “Con el Banco Nación hay un convenio para que, aquellos que cumplan criterios de conservación, tengan bonificaciones en las tasas de créditos específicos. Se incentiva la rotación de cultivos, los análisis de suelo, la práctica de fertilización (orgánica e inorgánica), entre otras medidas para propender a la conservación”, dijo.

Luego, Fernanda González, ministra de Producción de La Pampa, indicó que su distrito es ganadero y agrícola y describió que tienen 14.600.000 hectáreas, donde el 35% es de bosque nativo, propendiendo a la producción silvopastoril y otras alternativas de aprovechamiento sustentable.

“La conservación del suelo es una política de Estado”, apuntó y dijo que existe una ley que declara “de interés público” el uso sustentable del recurso suelo y las acciones públicas y privadas tendientes a la prevención de proceso de degradación.

En este sentido, señaló que se creó el Consejo Asesor de Suelo, integrado por la Facultad de Agronomía, el INTA, entidades científicas y técnicas, organismos del campo, Aapresid, entre otros.

“En 2010, se creó el registro de planes de manejo de cultivo de maní controlado por el área Agricultura del Ministerio de la Producción. El objetivo es fomentar el sistema “Siempre Verde” para evitar la degradación de los suelos, esencialmente por la erosión eólica. La Pampa exhibe una característica de bosque y monte o bosque y pastizal, que contribuyen a la no desertificación”, afirmó.

Por último, Javier Rodríguez, ministro de Desarrollo Agrario de la provincia de Buenos Aires, detalló los programas puntuales que encaran campañas de difusión acerca del cuidado y la conservación del suelo, capacitaciones en el mismo sentido, e investigación, desarrollo y experimentación.

“Este año se implementó un programa de Buenas Prácticas Agrícolas (BPA) con dos ejes centrales: uno es la aplicación de agroquímicos y el otro puntualmente la conservación del suelo. Se exige la presentación de planes trianuales que muestren planes de conservación del suelo y la contrapartida es un beneficio del 10% de descuento en el Impuesto Inmobiliario Rural”, dijo.

Por otra parte, contó que también impulsan un programa de incentivo para las producciones silvopastoriles y que al mismo tiempo promueven la generación de barreras forestales con doble propósito: de cobertura y de producción.

“Asimismo, estamos dando un fuerte impulso a un programa de agroecología. En las 14 chacras experimentales del ministerio, se generan líneas de investigación en forestación, ensayos, análisis y experimentación respecto de la producción de flores y se fomenta la rotación de cultivos y el uso de cultivos de cobertura. Conformamos una Mesa Provincial de Suelo y Conservación de Suelo para articular con los organismos científico tecnológicos que van realizando prácticas y recomendaciones. Cualquier producción agropecuaria parte de contar con un suelo sano, en condiciones”, destacó

– LA NACIÓN