FONDOS. La mina de oro de Veladero es generadora desde el 2005 de un importante volumen de recursos para el departamento.
José Luis Ponce, un concejal opositor al intendente Jorge Espejo, de Iglesia, presentó ayer un pedido de informes para conocer cuánto ingresó de regalías mineras al municipio durante el 2020 y en lo que va del 2021 y qué destino se le han dado a los recursos. Frente al planteo, el jefe comunal, molesto con la actitud, atribuyó la maniobra «a una especulación política por la campaña». Y dijo que toda la información necesaria la tiene el Concejo Deliberante porque le envían balances mensuales con el detalle de los movimientos.
La presentación tiene lugar a menos de una semana de presentados los candidatos a diputados nacionales que llevarán los frentes que participarán, primero en las primarias previstas para septiembre y después en las generales en noviembre. Y por eso Espejo optó por calificar a la solicitud de una cuestión electoral.
Ponce llegó al Concejo como integrante del Frente Con Vos, que lidera Marcelo Orrego, y es en realidad el único opositor al jefe comunal. Es que Espejo ganó las elecciones en el departamento con un partido municipal, Somos Integración, y logró dos bancas en el cuerpo, la de la presidenta, Gladys Bernabeu, y la de Fernando Quilpatay. El Partido Bloquista, al que pertenece el jefe comunal aunque armó su propia estructura, tiene también dos bancas. Son las de Gustavo Deguer y Leonardo Godoy, pero son cercanos al jefe comunal, y el quinto integrante es Ponce. En la práctica es el único que no comulga con el intendente.
El tema de las regalías mineras en Iglesia ha sido motivo de cuestionamientos en distintos momentos de la vida política de ese departamento. Es que allí se ubica Veladero, la mina más grande en explotación en la provincia, e importante generadora de recursos para el municipio. Y desde la gestión de los hermanos Marinero al frente del municipio el tema fue motivo de cuestionamientos. Es que, por ejemplo, se les atribuyó destinar recursos de la minería para engrosar la planta municipal con contratados y al pago de becas y subsidios, sin destinar fondos en obras estratégicas o de infraestructura o desarrollos productivos alternativos.
Ahora, según Espejo, ingresaron a las arcas municipales durante el 2020 un total de 451 millones de pesos, de los cuales destinaron 108 millones de pesos en obras y los 343 millones de pesos restantes pasaron al presupuesto del 2021. Y, en lo que va del año, precisó que se han destinado otros 100 millones de pesos en distintas obras y que trabajan en un plan de construcción de casas.
Ponce sostiene que «al Concejo Deliberante no llegan los balances y en las planillas que nos mandan no se especifica en qué se ha gastado la plata de las regalías». Y agregó que «no desconfío del Ejecutivo municipal, pero quiero saber cuánto dinero ha ingresado de las regalías y en qué se ha gastado».
Sobre la actitud de Ponce dijo que «me llama la atención porque todos los concejales tienen la información y no sé por qué él no la ha visto. Está en una postura errónea que sólo se entiende por una especulación política».
Sobre el plan de obras a ejecutar, Espejo precisó que «apenas pasen los fríos vamos a largar la construcción de entre 50 a 60 casas en terrenos municipales», Y dijo que además están arreglando las plazas de Las Flores, Tudcum y Rodeo. Incluso la de Tudcum está próxima a ser finalizada.
También mencionó que quiere trabajar en el desarrollo de la infraestructura turística y que tiene en carpeta un proyecto para un parque industrial.
Movimiento
451 Es la cantidad de millones de pesos que ingresaron a la Municipalidad de Iglesia en el 2020 correspondientes al pago de las regalías mineras de Veladero.
Hubo roces por el proyecto Josemaría
En mayo pasado se generó una polémica en el que apareció el tema de las regalías cuando el intendente de Jáchal, Miguel Vega, salió a reclamar que la empresa Deprominsa, subsidiaria del grupo Lundin, para su proyecto Josemaría, incorporara a su departamento en la calificación de «influencia directa», como está Iglesia, antes de que las autoridades provinciales aprueben la declaración de impacto ambiental del proyecto, actualmente en estudio. El argumento fue que le correspondía porque el agua que usará la mina proviene del río Blanco, que a su vez es afluente del Jáchal. Buscaba así cosechar beneficios tales como regalías mineras y programas de desarrollo sustentable de la empresa en cuanto a la contratación de mano de obra y de proveedores. Pero su par iglesiano Espejo dejó en claro que rechaza ese reclamo. «Iglesia no va a ceder nada de lo que corresponde en el departamento donde está la extractividad del mineral», le contestó el jefe comunal. Incluso desde La Rioja hubo planteos similares.
– Diario de Cuyo