“Para mí, Alfonsín es mi segundo padre”

LOA. – El resultado electoral el once de agosto no fue bueno para el radicalismo, pero más allá del resultado vos dijiste estar satisfecho, ¿por qué?

P. F. – Sí, porque logramos establecer un piso más que importante de votos que me permitió ganar el lema, contra estructuras partidarias fuertes, incluso creo que esa cantidad de votos, que fueron 4.400 en un espectro divisorio de 17 candidatos, fue importante. Fue la mejor elección en la provincia, por el porcentual que se perdió, que fueron tres puntos y medio contra veinte que se perdieron en la mayoría de las localidades.

LOA. – ¿Hubo autocrítica en el plenario radical?

P.F. – Creo que la autocrítica fue haber confiado en algunos números que se tiraron y marcaban otra cosa, un poco lo que paso a nivel nacional, que se decía que había tres puntos y termino en diecisiete. Había un voto que la gente no manifestaba, que por ahí no sé si es culpa de las encuestadoras, pero, hubo mucho voto que la gente lo tenía bien guardado, el voto castigo a las medidas económicas que se estaban llevando. Incluso en Córdoba, el justicialismo hizo la mejor elección de los últimos años, fue 65/45 y en 2015 de 70/30.

LOA. – Un dirigente radical contó después de ese domingo que Eduardo Costa le había confesado que en marzo ya sabía que iban a perder…

P. F. – Yo no tengo el diálogo que tienen algunos con Eduardo, todo el mundo sabía que yo iba derecho a octubre, pero participé porque fue un pedido del radicalismo para sumar todos con caudal de votos y lograr el triunfo. No se dio, pero yo la verdad que no tengo más que palabras de agradecimiento con la gente porque cada vez que me presento tengo buenos resultados personales.

LOA. – ¿Qué significa que exista Unidos y que el Comité Provincia ratifique su pertenencia a Cambiemos?

P. F. – Yo asistí al plenario del comité provincia y quedó aclaro que todas las fuerzas que integraban ‘Nueva Santa Cruz’, que expiró, tenían la posibilidad de llevar candidatos a presidente menos la fórmula Fernández- Fernández, pero para el resto, quedaba libre la posibilidad de llevarlo a Espert o Lavagna, esa medida adoptó Río Gallegos para constituir el lema ‘Unidos’.

‘Nueva Santa Cruz’ fue un frente electoral temporal que ya terminó, ahora en todas las localidades de la provincia se llama ‘Unidos’, nos copiaron en el buen sentido, porque nosotros como capital decidimos ese nombre y era muy desprolijo que los demás tuviesen otro lema. Ya se sumaron todas las localidades y en toda la provincia están constituyeron lemas locales con esa denominación.

LOA. – ¿Qué rol pensás que va a tener Eduardo Costa en octubre?

P.F. – No lo sé, no he hablado con él desde el 6 de agosto. No he tenido la oportunidad, pero entiendo que vendrá a votar, supongo.

LOA. – Como radical, ¿cómo explicas el estado de la ciudad?

P. F. – Creo que a simple vista está el abandono y el caos que se está viviendo en Río Gallegos, que es una ciudad detonada, se necesita gestión, ganas, trabajo, rumbo y no tiene nada de eso esta gestión. Lamentablemente se vieron desbordados en un montón de aspectos y por eso la gente le manifestó al intendente, cuando se presentó en agosto, su enojo en las urnas. Un intendente de la capital que fue duplicado por un chico de Río Turbio no es normal. La gente se expresa de la única manera que pueden, ‘no hiciste lo que prometiste, yo te voy a votar en contra’.

LOA. – ¿Le encontrás muchas diferencias con la gestión de Cantín con la que fuiste oposición en el Concejo Deliberante?

P. F. – Fueron dos gestiones absolutamente intrascendentales, pero una con episodios de corrupción complicados que me motivaron a hacer las denuncias penales, y esta no, por lo menos no se ha visto ninguna cosa rara. Pero fueron dos gestiones que han abandonado absolutamente a la gente.

No quiero ser demagógico, pero creo que lo que uno puede prometer es devolverle la alegría a la ciudad. Hay muchos proyectos que pueden sonar soñadores, pero lo último que podemos perder es querer hacer algo diferente. ¿Por qué otros pudieron y nosotros no? Eso es algo que me genera un desafío, esa hoy es una mala palabra porque fue la que usó Giubetich en 2015, pero el desafío de él era esquivar pozos, la basura, el mío es cambiar la fisonomía de la ciudad.

LOA. – ¿Sos amigo de Giubetich?

P. F. – No tenemos una amistad, pero nos conocemos hace treinta años, sabemos cómo piensa cada uno. Yo creo que él quería ganar por una cuestión de ego y personalismo. En 2015 todas las encuestas marcaban que yo estaba cinco puntos arriba y faltando una semana ‘Freddy’ y ‘Pirincho’ quisieron darle una mano a él y lo acompañaron a los actos, pero además cerró con un sector del peronismo y yo no. Ahora (risas) me los encontré y me dijeron que quieren apoyarme porque Roberto les falló.

Pienso además que cuando llegó llegó se dio cuenta que no tenía equipo y esta no es una cuestión personal, si no te vales de un buen equipo es imposible. Vos como intendente tenés que aplicar el destino, ‘vamos hacia allá’, y si algún funcionario quiere ir para otro lado, lo sacas, por esa situación de no tener equipo son los problemas que vive la ciudad.

LOA. – La semana pasada se conoció la salida de Leonardo Roquel de la Dirección de Deportes, después que cerrara con vos para octubre, ¿qué podés contar de esa interna?

P. F. – Mirá, yo hablé con Leo, la verdad que lo noté no solamente dolido, sino muy triste porque no es el ejemplo que les tenemos que der a los jóvenes. Tenemos que mostrarles que la política está para servir a la gente y no para tomar revanchismos. Está triste, partido al medio, está saliendo ahora adelante porque tiene una manifestación de apoyo increíble en las rede sociales, con muchísima gente solidarizándose con él porque no se lo merece.

Es un chico que yo lo enfrenté el once de agosto, de manera ejemplar, y bueno, teníamos esa rivalidad sana, lo que motivó que ahora decidiéramos generar un camino con la experiencia que puedo tener yo, más las ganas y la juventud suya, que además fue el único que tuvo una gestión rescatable en la Municipalidad. Decidimos encarar un proyecto nuevo y por lo cual, seguramente lo tendremos el año que viene en el Concejo Deliberante.

LOA. – ¿A qué se debe el distanciamiento con Fabián Leguizamón?

P.F. – Lo que pasó es que las cosas tienen que fluir solas y el decidió abrirse su propio camino, yo lo entendí, lo apoyo porque, en definitiva, cada uno en política siempre va buscando un lugar que se va ganando. Yo lo entendí y hablamos y le dije que está bien, que es un camino que eligió junto con un grupo de chicos que estaban acompañándonos. Le deseo la mejor de las suertes y que tenga una gran elección en octubre. Nunca tuvimos un enojo ni nada por el estilo, simplemente que él pensó que ahora era su momento.

LOA. – ¿Cómo ves que los representantes de tu partido no fueran a la convocatoria del diálogo que hizo la gobernadora?

P. F. – No me parece bien, yo hubiese ido porque esto no es River-Boca, no es así. Cuando vos tenés un mandato de la gente para dirigir destinos, sean leyes o un ejecutivo, lo único que tenés que hacer es pelear por tus ideas, pero a favor de la gente. Por eso cuando ‘Pirincho’ y ‘Freddy’ fueron criticados por reunirse con la gobernadora, yo fui de los pocos que los apoyé.

Siempre hay que hablar, yo hablo con todos, tengo muy buena relación con gente de la izquierda, con peronistas, me llevo bien con todos y sé que la única manera de lograr acuerdos es con dialogo. Hoy lo que te marca la política es que la gente quiere que la dirigencia hable. Mira lo que pasa a nivel nacional: cuando los líderes tienen chisporroteos hay fluctuación de la moneda.

LOA. – ¿Qué harías con el Sipem?

P. F. – Está todo inventado, ¿por qué no copiamos las cosas que se hicieron bien en Punta Arenas, en Trelew, Madryn? Para mí tiene que ser un servicio que se presente a la comunidad por una ONG, que en definitiva logre generar trabajo y bienestar a ese organismo, llámese Apady, Paycan, pero tiene que ser trabajado por ellos, que le brinden un canon al municipio, y los hicos que están en el Sipem tienen que ser pasados a planta y distribuidos en los lugares que se necesita en Río Gallegos, que no estén ociosos.

LOA. – ¿Cómo ves la gestión provincial?

P. F. – Y, ahí tenemos que volver a recurrir a las urnas, un gobierno que tenga el 22% del apoyo en algo está fallando, y deberían rever qué fue lo que han hecho para mejorarlo. El apoyo popular es el que te da esa impronta del voto ganado. Yo le deseo la mejor de las suertes porque si le va a bien a la gobernadora, les va a ir bien a todos.

LOA. – En un hipotético balotaje, ¿a quién votas?

P. F. – Mirá, no me pasó nunca, creo que si hay balotaje estaré acompañado a ‘Juntos por el Cambio’, porque es quien hoy tiene respaldo de la UCR.

LOA. – ¿Viendo lo que está pasando?

P. F. – Yo tengo muchas diferencias con el gobierno de Macri, pero también con el del FPV. Hay aspectos económicos en los que seguramente Macri ha tenido grandes deficiencias, pero también me acuerdo de cosas que sucedieron en el gobierno de Cristina, llámese cepo cambiario, que ahora estamos en una situación similar. No me cierran ninguno de los dos modelos, pero por el apoyo del Comité Nacional, estamos embarcados en esto.

LOA. – Radical de cuna…

P. F. – Sí, mi padre era uno de los mejores amigos el Alfonsín y fundaron ‘Renovación y Cambio’ en Santa Cruz. El ‘zurdito de Chacomús’ en un viaje que hizo a Comodoro se encontró con mi padre, porque él no quería saber nada con la línea nacional de Balbín. Mi viejo era abogado y tenía estancias acá. Decidió darle todo el apoyo porque Alfonsín marcaba la social democracia de centro izquierda.

Hicieron muchos viajes, en el año ‘74 Alfonsín viene un mes y medio acá a Río Gallegos y se queda a vivir en el departamento con mi padre en calle España, vino a recorrer todos los pueblos de la provincia, hacían Río Gallegos-Turbio y de ahí se iban a Calafate, a San Julián, recorrían toda la provincia y hay muchas anécdotas. Iban en una F100 en caminos de ripio, tardaban tres días en llegar a caleta Olivia y Alfonsín era una persona que hablaba ante diez personas y estaba feliz, y mi padre le decía ‘juntamos 10, esperemos llegar a otro pueblo y tener 20’ y él le decía ‘no te preocupes Coco, que ya hablaremos ante una multitud’, y después se dio el ‘83 en el obelisco con casi dos millones de personas.

Siguieron juntos, mi padre fue diputado del ‘63 al ‘66, en el golpe militar y el derrocamiento de Ilia él se tiene que exiliar de Santa Cruz por poseer un diario muy de izquierda apuntado por los militares, y se van a Mar del Plata. En la clandestinidad vivió un par de años y yo nací en ese exilio en 1970.

LOA. – ¿Qué te dice tu familia de ser candidato nuevamente?

P. F. – Soy divorciado y estoy en pareja, tengo mi actividad desde hace muchos años que me ayuda a poder moverme con mayor libertad, y la verdad que la política es una pasión, algo que te mueve permanentemente, que estas siempre atento y alerta a ver cuándo podés juntar gente y charlar, es parte de una filosofía de vida. Yo admiro por ahí a los líderes que hemos tenido como el caso de Raúl, que para mí Alfonsín es mi segundo padre, siempre lo he dicho, estudio su vida y hoy me toca ser muy amigo del hijo, es algo que no tiene comparación con nada, la política para mi es una pasión.

LOA. – ¿A qué te dedicas el resto del tiempo?

P. F. – Tengo bienes raíces, todo lo comprendido en el rubro, pero intercalo mucho con el equipo de trabajo de Alberto Lozano, y eso me tiene muy vinculado, elaboramos muchos proyectos juntos, tenemos una oficina afuera de la Legislatura, donde nos ponemos siempre a trabajar.

LOA. – Lo acusaron duramente con el cruce de avales en la campaña, ¿cómo fue eso?

P. F. – Hubo mucha desinteligencia, dos técnicos que no fueron a hacer el cruzamiento, programas que fallaban, y en esa desesperación se hizo una presentación en la cual algunos protestaron, quedaron afuera pero todos participaron en otro espacios. No hay que buscar excusas ni echarle la culpa a nadie, la gente elige, si estás en una boleta, dos o tres, si la gente te va a buscar te pone el voto, sino no.

LOA. – ¿Qué hacés en tu tiempo libre?

P. F. – Cuando no tengo nada para hacer me gusta ver amigos, ir a sus negocios, hablar, hago un culto de la amistad, soy una persona que no puede vivir sin sus amigos, me gusta disfrutar de la casa, hablar tres cuatro, cinco, seis veces con mis hijas que están viviendo en Buenos Aires.

Tengo tres nenas y una del corazón, que es Naty, la patinadora que a todo el mundo le dice que yo soy su papá y yo con gran orgullo digo que sí.

Miro series, me gustó mucho ‘La Casa de Papel’, ni hablar, pero la que más me gustó de todas es ‘Sobreviviente Designado’, si te gusta la política, no podés parar de mirarla. Después, música, rock nacional.

LOA. – ¿Fanático de algo?

P. F. – San Lorenzo, mi familia completa, creo que mi madre solamente es la única oveja negra, que es Boca. El fútbol es una cuestión de varias generaciones que somos todos fanáticos de San Lorenzo, me da mucha tristeza cuando pierde y mucha algarabía cuando ganamos. Suelo ir dos o tres veces al año a ver los partidos, con mis hijas somos colaboradores del club, pagamos cuatro cuotas por mes para que San Lorenzo pueda ser más grande.

– LA OPINIÓN AUSTRAL