Dicen en la Legislatura que se habla poco del tema, que en las reuniones que tienen afuera se resisten a fijar el rumbo. Creen ellos que es ella la que les tiene que decir qué hacer, creen ellos así que al costo político no lo van a pagar.
Alicia ya les dijo, no en una, sino en las dos reuniones que hubo en el último mes, que no les iba a decir que modifiquen o que sostengan la Ley de Lemas, pero como dijo Pablo Grasso hace algunos días en este diario “a los peronistas nos gusta que nos conduzcan”.
En Cambiemos -que ya no se quiere llamar Cambiemos-, hacen números, y usan la falta de decisión política del bloque del PFV a su favor. Entonces, para ellos es el oficialismo el que necesita a la Ley de Lemas para retener la gobernación, porque de otra forma no podrían.
En la rosadita, en cambio, bajan la línea de que el sistema electoral no es un tema en absoluto, algo que tampoco podría ser verdad del todo, habiendo escaso margen para que se tengan que definir estrategias.
La semana pasada Encuentro Ciudadano anunció que Gabriela Mestelán es su candidata a gobernadora y que no va con Macri en la boleta. Ergo: EC da por hecho que la Ley de Lemas va a seguir vigente y que por lo tanto puede usar el sello del FUPVM sin reproches.
Por otra parte, desde el sector que impulsa la gobernación de Javier Belloni, prometen que la semana que viene podría haber novedades, aunque parece tratarse sólo de una expresión de deseo.
Sabemos que este viernes, en Piedra Buena hubo una reunión en la que se suponía que algunos intendentes del oficialismo debían continuar con las conversaciones por la reforma de la Ley de Coparticipación, sin embargo, los muchachos, que en su mayoría le quieren seguir dando duro y parejo, hablaron de lo que a ellos les parece hoy urgente.
Todos coincidieron en que no hay que cambiar el régimen electoral y que así se lo van a transmitir, en principio, a sus diputados por municipio.
Lo cierto es que los diputados del frente siguen jugando al silencio y sin mostrar iniciativa, mientras que Costa se hace los rulos con un remozado equipo sub 45, Alicia duerme tranquila, y Cristina desde ayer recibe soldados en su casa de Calafate.2
– LA OPINIÓN AUSTRAL