Los siete municipios que defiende Cambiemos

El macrismo levanta la guardia de las intendencias propias a sabiendas de que le será difícil hacerse de distritos nuevos. Dónde se sabe ganador y cuáles teme perder. Un repaso para adelantar la pelea de 2019.
Martiniano Molina lleva las de perder en Quilmes. En San Isidro

Martiniano Molina lleva las de perder en Quilmes. En San Isidro, Gustavo Posse va por un nuevo mandato. Para el PRO, Néstor Grindetti es ejemplo de gestión en Lanús.
Se sabe. En el Conurbano bonaerense se juega gran parte del destino del país. Y en una situación compleja de cara a las elecciones nacionales, tanto Mauricio Macri como la gobernador María Eugenia Vidal se apoyan en algunas de las gestiones que Cambiemos lleva a cabo en la primera y en la tercera sección de la provincia, los electorados más populares del país donde se encuentran habilitados para votar cerca de 10 millones de personas

En la actualidad, el macrismo cuenta con siete municipios de gran caudal electoral: Vicente López, San Isidro y Pilar, en el norte; Lanús y Quilmes, en el sur; y Morón y Tres de Febrero, en el oeste. Siete distritos que juntos contienen más de 2 millones de votantes.

Pese a que todos van por un nuevo mandato, en algunos casos (San Isidro y Vicente López) por última vez debido al fin de las reelecciones, las realidades no son las mismas. Y el oficialismo ya acusó recibo. Con pocas chances de ganar en otros municipios que no sean los propios, Cambiemos apuesta todo a las victorias en los municipios gobernados por Gustavo Posse y Jorge Macri, donde tienen asegurada una continuidad y buscan alzar los porcentajes de votos obtenidos con el fin de, en lo posible, hacer crecer tanto a Vidal como al Presidente.

Valenzuela no la tiene fácil en 3 de Febrero. Tagliaferro va por la reelección en Morón. Ducoté da pelea en Pilar. Macri va por la última.
Valenzuela no la tiene fácil en 3 de Febrero. Tagliaferro va por la reelección en Morón. Ducoté da pelea en Pilar. Macri va por la última.
En Pilar, en cambio, el intendente Nicolás Ducoté sabe que no la tiene fácil. No es nada nuevo. La misma situación vivió en 2015 cuando se hizo cargo del distrito. “Solemos hacer una PASO más complicada, pero mientras hagamos nuestro 32% o 35% tenemos una base para ganar en octubre”, asegura el intendente. Y agrega que “estamos haciendo lo mejor para Pilar, cerca de los vecinos y con más obras que nunca en la historia del distrito. Confiamos en que la comunidad va a dejar atrás el pasado y la corrupción y nos va a acompañar nuevamente como lo hizo en 2015 y 2017. La corrupción que hubo antes dejó secuelas y a Pilar con muchas necesidades y carencias. Nuestra contienda más fuerte es contra los que expresaron esa realidad que nosotros vinimos a modificar”.

En el oeste la jugada está más repartida. En Morón Ramiro Tagliaferro defenderá la intendencia con grandes chances de repetir su mandato. “Cuando comenzamos la gestión recibimos un municipio con obras paralizadas, sin planificación, en Morón había un Estado ausente. Nuestra respuesta fue algo concreto, sin promesas, trabajando en cada uno de nuestros ejes de gobierno”, asegura el mandatario. Y como parte de su gestión enumera: “Hicimos las cloacas de más de 40 mil vecinos y logramos un aeropuerto modelo en el país en El Palomar; saneamos las cuencas hídricas Boquerón, French-Azcuénaga, Haedo y Céspedes; instalamos más de 10 mil led; arreglamos más de 100 escuelas con provincia; construimos un Centro de Monitoreo de última generación; y estamos haciendo la mayor inversión en Salud en la historia del distrito ampliando todos nuestros Centro de Salud y creando dos nuevos”. Y agrega que “hoy las familias moronenses volvieron a disfrutar de su barrio porque los pusimos en valor y recuperamos el espacio público. En Haedo, el Metrobús es un éxito y de las 197 calles de tierra que había en el municipio hace tres años, asfaltamos 133; con un Fondo de Fortalecimiento hicimos obras en 160 clubes barriales; empezamos la gestión con 60 cámaras de seguridad y hoy tenemos instaladas 589 e hicimos 8 destacamentos policiales en plazas”.

Un poco más cerca de la Capital Federal, más precisamente en Tres de Febrero, la actualidad no es la misma. El intendente Diego Valenzuela no tiene la aceptación popular deseada. Pese a los 14 puntos de diferencia con Unidad Ciudadana que logró en las elecciones de 2017, el oficialismo sabe que no la tiene fácil. Los reclamos sindicales semanales, la denuncia de que el intendente se recluye en la municipalidad y, como último dato, una serie de registros insólitos en la última rendición de cuentas dejan al descubierto a un distrito que reconoce estar lejos de lo recientemente cosechado. Del otro lado, el peronista Juan Debandi se muestra como el candidato más fuerte para salir a competir por la localidad del oeste.

Municipios tuvo acceso a la última rendición de cuentas. Uno de los puntos más llamativos es el que asegura que para la limpieza de los centros deportivos (CEDEM N° 1 y N° 2) se utilizan 345 mil pesos quincenales con fondos del Financiamiento Educativo. Lo que llama la atención, además de la suma abultada, son los constantes reclamos de los vecinos por la falta de limpieza y mantenimiento de estos centros deportivos.

En el sur, Lanús es uno de los municipios que la tanto Nación como Provincia siempre utilizan como ejemplo a la hora de mostrar gestión. “Veníamos de una situación complicada. Estábamos en un pozo entre Avellaneda y Lomas de Zamora, que en su momento eran prósperos y habían tenido un crecimiento en infraestructura, pero Lanús no. Con ese diagnóstico del pasivo en infraestructura comenzamos a trabajar en tres planes: bacheo e iluminación, seguridad y un eje presente”, aseguran desde el municipio. El resultado fue la intervención de 1600 cuadras a través de la repavimentación y la colocación de 25 mil lámparas led; el crecimiento de 180 a 630 cámaras y de 250 policías locales a 750.

En relación al eje local, desde Lanús aseguran que “logramos que el Estado le dé servicios al municipio. Pasamos de tener una ambulancia a contar con 14. Somos un estado presente que escucha y atiende. Grindetti es un hombre importante del PRO, fundador del partido con muy buena relación y confianza tanto con Macri como con Vidal”.

Todo lo contrario sucede en Quilmes donde el electorado local no se ve seducido por la figura de Martiniano Molina. Luego de varios meses sin presencia en la calle, y con varios cambios en la oficina de comunicación (algo que no logró generar), el intendente volvió a mostrarse en público con el fin de intentar volver a ser electo algo que, para muchos, es una de las jugadas más arriesgadas de Cambiemos en el Conurbano. Razones no faltan. Es el electorado más grande con el que cuentan. Pero tan pobre es la gestión que hasta el excocinero encontró reparos internos, incluso de parte de Lilita Carrió, quien tiene ganas de poner a jugar a su abogada Mónica Frade.

Así las cosas, Cambiemos sale con la firme intención de conservar, aunque sea, lo que es propio. Mientras que en algunos municipios los resultados parecen cantados, hay otros en los que deberá dar batalla. La contienda está en marcha

– Ámbito