«La situación es compleja y la frazada corta está al rojo vivo»Nadín Argañaraz, economista

Consideró que ya es un hecho el salto inflacionario, la desaceleración del crecimiento y la pérdida de poder adquisitivo.

En el marco de las actividades programadas por el Consejo Profesional de Ciencias Económicas estuvo en Catamarca el economista Nadín Argañaraz, quien conduce el Instituto Argentino de Análisis Fiscal. Al analizar la situación económica actual consideró que es una situación muy compleja en la que todavía no se puede calcular hacia donde va a ir la economía argentina. Además, consideró que los efectos de la última corrida cambiaria son impactantes para la actividad económica.

– ¿Cómo analiza el momento económico por el que atraviesa el país?
– Creo que estamos en un momento económico complejo, que es un sinceramiento de los desequilibrios habituales que tiene Argentina y que nunca logramos solucionar de manera sostenida. Lo que estamos viendo fue una crisis cambiaria fruto de un exceso de demanda de dólares, en parte motivada por tenedores de Lebacs que decidieron retirarse de Argentina. Algunos argumentan que fue por el impuesto a las ganancias que comenzaba a regir para las Lebacs de extranjeros, pero también por la suba de interés de Estados Unidos. Aquí hay una situación concreta porque subió la tasa de interés de los Estados Unidos. Se encareció el crédito para todos, pero para nosotros se encareció relativamente más y esto tiene que ver con la vulnerabilidad que tiene Argentina con respecto al financiamiento internacional. Yo creo que vamos a seguir viviendo este tipo de cimbronazos. El 19 de junio tenemos otro vencimiento de Lebacs, que si bien el Banco Central está desarrollando distintos instrumentos y rescatando parte de esas Lebacs, son tantas las que vencen que igual vamos a tener un vencimiento del orden de los 600 mil millones de pesos y en este contexto genera mucha más incertidumbre.

– Teniendo en cuenta el dólar alto ¿qué costos tiene para el país sostenerlo con una tasa de interés tan elevada?.
– Ese es el punto clave. El Gobierno acertadamente luchó por la estabilidad y la estabilidad era parar la suba permanente del tipo de cambio que se iba dando de manera tan rápida. De todos modos, el tipo de cambio siguió subiendo y hoy está en $ 25,40 . El Gobierno priorizó parar eso porque veníamos perdiendo reservas y a la vez el tipo de cambio subía.

– ¿Qué es lo quedará tras esta situación que vivió el país.
– De esto queda un salto inflacionario, la inflación ya está cerca del 25% para todo 2018, lo que es un dato muy negativo porque indica que no vamos a poder bajar la inflación respecto al 2017, queda una desaceleración de la actividad económica que hoy estaría creciendo un 1,5%. Es decir que si bien creceríamos lo haríamos mucho menos de lo que se preveía que estaba en el orden del 3%. Queda una caída del salario real, que según nuestras estimaciones, de no mediar revisiones distintas a las pautadas, nos da una caída del poder adquisitivo del 8%. Esto es lo negativo porque nos quedamos con este costo, un costo social en materia de actividad, que va a repercutir en empleo y en salarios.

– ¿Qué le recomendaría a la gente ante este escenario?
-En este momento lo más razonable como consejo es parar. Quien tiene que tomar un crédito tiene que evaluar bien qué crédito, porque si es una tasa de interés variable estará expuesto a que puede ser impagable. Hoy hay que parar, pensar y eso hace que la economía se enfríe. Hay que cuidar la fuente laboral. Lo que yo creo es que hay que tener prudencia porque no está claro hacia dónde vamos a tomar . Y además en Argentina cuando sube el precio del dólar todo el mundo se asusta.

– ¿Cómo ve la discusión por las tarifas?
Nosotros propusimos que para alivianar el impacto en el bolsillo de la suba tarifaria se eliminara la mochila tributaria porque cuando uno mira las facturas, en promedio, un 30% de lo que se paga son impuestos. Ahora esto tiene un costo fiscal, nosotros hacíamos una propuesta transitoria. Son discusiones que hay que darlas y ojalá se den con la mayor seriedad. La situación económica es compleja y estamos con una frazada corta que está al rojo vivo, tironeada de todos lados y que requiere un equilibrio y una señal clara.

«Provincias mejor paradas»

-¿Cuál es la situación de las Provincias en este contexto económico?
– La ventaja del conjunto de las Provincias es que hoy tiene un déficit que es del 1% del Producto Bruto Interno. Nación tiene un déficit del 6% . Las Provincias están bastante bien en cuánto a necesidad de financiamiento, pero esta situación, que también paraliza decisiones, está afectando la recaudación. Según mi información, en varias provincias se está golpeando la recaudación y eso marca que el trabajador, al elegir cómo administra sus ingresos, elige no pagar impuestos como el inmobiliario o automotor o lo pospone. Como marco general, las provincias están mejor paradas que otras veces. Hay que ver qué pasa con la caída de la actividad económica, que obviamente va a repercutir en todo el país. Aquí también queda un tipo de cambio real y hemos vuelto con esta devaluación al mismo nivel que había con la salida del cepo cuando asumió este Gobierno. Eso en algunas economías regionales puede ser un aliciente para el desarrollo de las exportaciones y en otras jurisdicciones puede ser negativo porque lo que hace este dólar es encarecer las importaciones. Es por eso que la frazada corta está al rojo vivo.

– El Ancasti