Cayó la cantidad de piquetes en la ciudad a pesar del enojo de Rodríguez Larreta

En abril, el gobierno porteño registró 47 cortes, menos de la mitad que en marzo, según un informe propio; también se redujo con respecto a 2017

Los piquetes siguen ocupando la agenda política de la ciudad de Buenos Aires, la provincia de Buenos Aires y los principales centros urbanos de todo el país. De hecho esta semana una seguidilla de cortes volvió a alterar el centro porteño y reeditó imágenes habituales.

La sucesión de protestas llevó a que el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, expresara su enojo por el tema y tuviera que salir a decir que sigue trabajando en lo que llama «la recuperación del espacio público».

Sin embargo, de acuerdo a cifras oficiales, en territorio porteño la cantidad de marchas se redujo en abril. Según el relevamiento que el Ministerio de Seguridad porteño hace todos los meses, al que accedió la nacion, en lo que va de abril hubo 47 piquetes en la Ciudad, mientras que hace un año en el mismo mes habían sido 76.

La cantidad es significativamente inferior a la que se había registrado en marzo, cuando las marchas con bloqueos del tránsito fueron 101. En marzo del año pasado, no obstante, la protesta callejera tuvo un pico: entre el conflicto docente, los reclamos gremiales por paritarias y la movilización por el Día de la Mujer, entre otras, los piquetes sumaron 120.

No obstante, las cifras de abril difundidas por el gobierno porteño difieren sensiblemente de las que registra la consultora Diagnóstico Político, que también todos los meses releva la cantidad de protestas con bloqueos al tránsito en todo el país.

Según esa entidad, aunque el número de abril estará cerrado recién la semana próxima, la cantidad de piquetes del mes está más cerca de la centena que se registró en marzo que de los 47 que hasta ahora contabilizó el gobierno de Rodríguez Larreta.

En las últimas horas fue el propio Rodríguez Larreta quien puso el tema en el centro de la escena con una frase contundente.

«Estoy hinchado las pelotas de los cortes, pero trabajo mucho para evitarlos», sentenció el mandamás de la ciudad en declaraciones a A24. «[Los cortes] tienen que seguir bajando en la cantidad y en el impacto. Antes se cortaban las calles todas las semanas, ahora te cortan unos carriles. Antes cortaban siempre el metrobús, ahora no se corta casi nunca salvo el otro día y lo asumo como un error. Hay un derecho a manifestarse, pero hay que equilibrarlo», ahondó.

La movilización a la que aludió Rodríguez Larreta es la Marcha nacional por trabajo, educación y vivienda, que el miércoles último encabezaron varias organizaciones sociales.

La jornada de protesta comenzó con un acto en Plaza Constitución. Luego, los manifestantes marcharon a la Jefatura de Gobierno y la Secretaría de Vivienda y Desarrollo Urbano y, por último, se concentraron en la zona del Obelisco, donde bloquearon el tránsito.

Ese mismo día, en el marco del paro nacional convocado por docentes bonaerenses, organizaciones sociales y gremios de la provincia, nucleados en el Frente de Unidad Docente (FUD), marcharon por el centro porteño en reclamo de mejoras salariales. Hubo demoras en el tránsito en los accesos al Puente Pueyrredón y en las calles aledañas al Obelisco.

Más allá de la discrepancia en los números, en el gobierno porteño creen haber «avanzado mucho» en el ordenamiento de la «convivencia» entre la protesta callejera y el tránsito. «Es un trabajo lento, pero va dando frutos. Tenemos que generar conciencia y hacer cumplir la ley. Todo a la vez», dijeron a la nacion desde Parque Patricios.

Destacan en particular que ya esté «instalado» que para manifestarse en la Ciudad haya que avisar a las autoridades y que las movilizaciones ya no incluyan cortes de los carriles del metrobús, pese al bloqueo de la semana pasada.

El próximo paso, aseguran, es lograr que cuando haya concentraciones frente al Ministerio de Desarrollo Social, en la intersección de las avenidas 9 de Julio y Belgrano, los manifestantes dejen carriles libres al tránsito.

Por: Lucrecia Bullrich – LA NACIÓN