Por efecto del pacto fiscal, los municipios de todo el país dejarán de recibir $2.300 millones

Los fondos a provincias no son coparticipables

Las condiciones con las que las provincias firmaron el pacto fiscal con la Nación anticipará una disputa entre gobernadores e intendentes municipales. Se trata de una discusión por unos $2.300 millones en todos las intendencias del país, con excepción de las bonaerenses. De acuerdo a la letra del Consenso Fiscal, la compensación que reciben las provincias por la eliminación del Fondo del Conurbano y el fin del reparto del Impuesto al Cheque, por unos $16.000 millones, no podrá ser repartido entre los municipios, a diferencia con lo que sucedía con el esquema anterior, ya que tendrá como destinos fijos «inversiones en infraestructura sanitaria, educativa, hospitalaria, productiva, de vivienda o vial».

La puja por esa masa de fondos, que para las finanzas municipales puede significar una porción importante de ingresos, tendrá lugar en todas las provincias del país salvo en Buenos Aires. El Gobierno nacional se comprometió en el Consenso Fiscal a destinar unos $16.000 millones a las provincias como compensación del nuevo esquema de reparto (fin del Fondo del Conurbano e Impuesto al Cheque dirigido por completo a Anses) que en la gran mayoría de los casos terminaba dando un saldo negativo para las gobernaciones.

No obstante, la regla del pacto fiscal otorga destinos determinados a esos fondos. «La compensación será administrada por cada jurisdicción y se destinará a inversiones en infraestructura sanitaria, educativa, hospitalaria, productiva, de vivienda o vial en sus ámbitos urbanos o rurales», afirma el inciso del acuerdo. De esta forma, queda teóricamente eximida del derrame hacia los municipios. Una parte de los fondos compensatorios que recibe Buenos Aires (19.000 millones de pesos), de hecho, está expresamente excluida de esa obligación.

El déficit consolidado de los municipios alcanza los $10.000 M según el Observatorio Fiscal

Compartir
Cada provincia tiene, de acuerdo a sus leyes locales, distintos esquemas de reparto con los gobierno locales dependiendo las potestades tributarias que tenga el tercer nivel de gobierno y las responsabilidades de gasto. Para el caso particular de los fondos de la coparticipación que baja desde la Nación, las provincias tienen regímenes de reparto con municipios más o menos generosos, en un rango de entre 8% (San Luis), 10% (Chubut, Formosa o Río Negro) y hasta 25 y 26,5% (Catamarca y Tierra del Fuego, respectivamente). Considerando cuánto es la compensación de cada provincia en particular y cuánto de ese total se destinaría teóricamente a los municipios, la conclusión es que los fondos que las comunas dejan de percibir se acerca a los $2.300 millones.

La suma es considerable teniendo en cuenta que el déficit del consolidado municipal, de acuerdo a datos de fin de 2016 del Observatorio Fiscal Federal, se acerca a los $10.000 millones. De acuerdo a estudios privados, además, los ingresos de coparticipación representan para las arcas municipales cerca del 43% de la composición de sus recursos. El pacto fiscal, por otra parte, prevé crear leyes provinciales de responsabilidad fiscal para controlar el gasto en las intendencias.

En un informe reciente, el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (Iaraf), propuso que «una salida sería que ese dinero se coparticipe a los municipios con igual destino (inversiones en infraestructura, etcétera). De este modo, los municipios evitarían verse perjudicados recibiendo menos recursos que los que les correspondería según lo que establezca la ley de coparticipación municipal en cada provincia», concluyó.

Gobernadores que aprobaron el acuerdo se reparten $515 millones
El Gobierno nacional repartió en enero más de 42 millones de pesos entre las nueve provincias que no pasaron el consenso fiscal por sus legislaturas, a pesar de que era uno de los mecanismos de penalidad previstos en el acuerdo. Las que sí lo hicieron recibieron 515 millones. Según datos de Hacienda, en concepto de Fondo Federal Solidario (conocido como el fondo sojero ya que es una detracción de los ingresos por exportaciones de ese grano), la Casa Rosada distribuyó en el primer mes del año 42,7 millones de pesos entre nueve distritos que no aprobaron en sus parlamentos locales el pacto fiscal. Esas provincias son Santa Fe, Mendoza, Corrientes, Santiago del Estero, Chubut, San Juan, Jujuy, La Rioja y La Pampa. Las catorce provincias que sí lograron obtener el aval de sus legislaturas para el acuerdo fiscal, en tanto, fueron acreedoras de unos 515 millones de pesos por el fondo solidario. Esas provincias son Buenos Aires, Córdoba, Salta, Misiones, Tucumán, Chaco, Neuquén, Formosa, Río Negro, Entre Ríos, Catamarca, Santa Cruz y Tierra del Fuego. Para este grupo de provincias en concepto de compensación recibieron $777 millones.

por Mariano Boettner – BAE