Nuevas tarifas en transporte agregan un 1,7% en la inflación del 2018

A los aumentos en las tarifas de electricidad y gas se suman desde febrero las de transporte. No se descartan más aumentos en el segundo semestre

El nuevo esquema en las tarifas de transporte público que se pondrá en vigencia desde febrero implicará un impacto en la inflación de hasta 1,7% para la Ciudad de Buenos Aires durante el año, de acuerdo con estimaciones privadas. Si bien el Gobierno buscó que el traslado a precios se podujera de manera escalonada, al acumular los efectos hasta junio, el aumento en los colectivos, trenes y subtes implicará una mayor presión para los bolsillos, que se sumarán a los de la electricidad y gas, entre otros.

Matías Carugati, economista jefe de Management & Fit, calculó que en febrero el impacto total será de 0,8% en la inflación, a lo que le agrega un 0,4% en abril y otro 0,3% en junio. Al hacer el acumulado, el efecto total en los bolsillos trepa hasta 1,7%.

Para llegar a estos números calculó que la variación a junio de este año es de una suba de 63% para los trenes en los ramales Roca, Belgrano Sur y Norte, y Urquiza; un 69% para el Mitre, San Martín y Sarmiento; un 67% en el colectivo; y otro 67% para los subtes. Y tomó las ponderaciones vigentes en 2013 del IPC porteño, que es lo que se puede encontrar con este grado de detalle. Es decir, lo que el Indec dará a conocer en la variaciones de precios implica otras ponderaciones, por lo que el impacto podría ser diferente.

Balanz Capital también prevé que el impacto en la inflación será de entre uno y 1,5 punto. «Si suponemos que subte, tren y colectivos explican menos de la mitad del rubro transporte en GBA (aún el Indec no difundió la desagregación completa de los capítulos que componen el índice nacional), el aumento de tarifas aportaría entre 1 y 1,5 punto a la inflación de 2018», aseguraron.

Para Nicolás Abuchar, de Elypsis, el efecto que causarán las subas en las tarifas de transporte público serán menores. Para febrero esperan un impacto cercano a 0,3%. A este porcentaje le agregan los de los meses posteriores y llegan con un 0,5% para el primer semestre. Lo hacen teniendo en cuenta un IPC a nivel nacional, por eso la incidencia es menor.

Un punto que resaltó sobre la nueva plataforma multimodal que presentó ayer el Gobierno (que implica que en un segundo viaje se paga un 50% menos del valor total y, en un tercero, un 75% por debajo) es que el IPC del instituto de estadísticas oficial no debería captarlo. «Esto es porque lo que tiene en cuenta es el valor de la tarifa. Del mismo modo que no capta los precios en cuotas, por ejemplo, tampoco debería captar el efecto de los descuentos por mayor uso», explicó Abuchar.

Para que el Indec pueda incorporar el uso de la «plataforma multimodal» va a ser necesario modificar la metodología. «Es parecido a lo que pasó el año pasado con los peajes cuando pasamos de dos a cuatro tarifas por categoría», ejemplificó Gabriel Caamaño Gómez, de Consultora Ledesma. Por ese motivo, señaló que no es posible calcular cuál sería el impacto en el IPC. «La clave pasa por saber cómo va a ponderar el Indec esto», afirmó.

Las estimaciones privadas contemplan las subas en los pasajes de transporte público hasta junio. El segundo semestre aún está abierto, ya que el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, no descartó ayer que se pudieran dar nuevas subas en lo que resta del año

por MARÍA IGLESIA Y DAVID CAYÓN – Cronista