La fundación de aquel pueblo que nació en una Pampa con la presencia del entonces gobernador Eugenio Tello.
EN EL RECUERDO/EL PUEBLO DE ABRA PAMPA, CON EL HUANCAR COMO CENTINELA DE LA PUNA.
Muchos de los abrapampeños al estar hoy participando en los actos centrales o caminando por las calles céntricas de la ciudad, podrán retrotraerse en la imaginación y dibujar como se sucedieron los hechos de la fundación de aquel pueblo que nacía en una Pampa con la presencia del entonces gobernador Eugenio Tello.
Según los datos históricos dicen que la comitiva de autoridades se estableció en el domicilio de Apolinar Ovando para dejar fundado el nuevo pueblo.
A 134 años del memorable momento, sabemos todos que La Capital de la Puna es hoy una cuidad epicentro de casi de toda la región, donde convergen decenas de pueblos con su cultura y tradiciones, tal cual decía Aldo Víctor Ábalos: «Abra Pampa se nutre poblacionalmente por toda la Puna, gente de los cinco departamentos que decidieron echar raíces en la ex Siberia Argentina, entonces toda vez que hablamos de Abra Pampa no podemos hablar específicamente de ella, sino de toda la puneñidad».
Así se registra, uno de los pocos audios que existen de una personalidad histórica al dialogar con una emisora local, tal vez en uno de las últimos agostos para Aldo Víctor, hace más de cinco años.
Crecimiento poblacional
Abra Pampa sigue teniendo un importante crecimiento poblacional, muchos coterráneos llegan de distintos lugares de la Puna para residir en Abra Pampa, por eso la demanda de viviendas y lotes es siempre alta, creándose 2 o 3 barrios en los últimos años.
En los 134 años ya no aparecen huellas de aquella fundidora Metalhúasi, aunque espera con ansias poder dar utilidad a dos importantes obras que se hicieron con el fin de remediar los puntos contaminados de plomo, como el anfiteatro que nació en aquel montículo de desechos de minerales y chatarras y el polideportivo que ocupa importante espacio, pero a la fecha está cerrado, esperando los resultados de los últimos estudios que sean positivos para poder quedar al servicio de la comunidad.
En los últimos años la situación gubernamental no fue del agrado para muchos, como ocurre también con el gobierno nacional, es notable a la fecha la falta de obras públicas, aunque el gobierno local menciona un trabajo diario de gestión y que los resultados están próximos a visualizarse.
Sin lugar a dudas que los tiempos son diferentes pero su gente sigue siendo la misma, caracterizado generalmente por la amabilidad, la humildad y un buen recibimiento de quienes eligen hacer turismo por la zona, así lo califican quienes pisan suelo abrapampeño.
– El Tribuno