El Parque Industrial cipoleño tiene empresas en lista de espera

El Parque Industrial de Cipolletti es uno de los polos productivos de la región con mayor actividad. Más de 100 empresas están inscriptas en un registro municipal, a la espera de que se les asigne un lote para radicarse en el lugar. Superar algunos problemas de infraestructura y terminar de definir sus límites, es el desafío que persigue la gestión municipal.

El Parque Industrial cipoleño tiene alrededor de 40 años y como sucede con otras áreas industriales de ciudades vecinas, se gestó sin tener en cuenta una planificación a futuro que le permitiera crecer sin convertirse en un vecino “molesto” para los sectores urbanizados.

Más allá de que quedó inserto en un “anillo” que a futuro le pondrá un límite a su crecimiento, el Parque Industrial todavía tiene mucho para dar . Tiene una característica que lo define y lo diferencia de otros: es mixto. Posee una gran variedad de empresas que están instaladas en sus tierras y que desarrollan diferentes actividades.

La propiedad del Parque Industrial es uno de los condicionantes: gran parte de la tierra está en manos de privados y un sector acotado pertenece al Estado municipal. Hoy la comuna sólo tiene para ofrecerles a las empresas que quieren radicarse en el lugar 32 lotes. La demanda de parcelas supera ampliamente la disponibilidad.

Según explicó Eduardo Romero, quien se desempeña como director del Parque Industrial, existen actualmente unas 100 empresas que están inscriptas en un registro, a la espera que se les asigne un lote. Esa treintena de parcelas recién estarán disponible en unos 9 meses más ya que la comuna las está dotando de la infraestructura necesaria. Una ordenanza fija que el municipio debe vender los lotes con los servicios básicos instalados (agua, luz, gas y cordón cuneta).

“En su momento, cuando se gestó este Parque Industrial, un grupo de familias apostó a crear un área productiva y constituyeron un área de servicios. Como era un lugar alejado, empezaron a producir pero Cipolletti fue creciendo cada vez más, se fue expandiendo y hoy tenemos un Parque Industrial que está en el medio de la ciudad, con barrios alrededor”, señaló Romero.

El municipio ha puesto manos a la obra sobre el Parque Industrial para organizar su crecimiento. El anillado sobre el que se proyectó su expansión, tiene una superficie estimada de 90.000 metros cuadrados. Aproximadamente un 40% está ocupado por las empresas pero la mayoría de las tierras son de dominio privado.

La capacidad
32
lotes tendrá disponible el Municipio dentro de nueve meses. Son pocos para la demanda existente.
En los próximos días habrá una reunión entre el Municipio y las empresas del Parque Industrial para analizar mecanismos que aporten a la seguridad.
Una de las potencialidades de la plaza industrial está dada por la variedad, jerarquía y la trayectoria de las empresas que operan en lugar. Sin embargo, a la hora de escuchar las voces de los emprendedores y empresarios, muchos valoran los aspectos positivos del Parque Industrial pero también resaltan los problemas con lo que conviven desde hace largos años.

La falta de seguridad y el mal estado de los caminos, son los reclamos que se reiteran. Mejorar la iluminación con un sistema de led y reparar los caminos mediante la contratación de una empresa, son algunos de los proyectos que el municipio tiene en carpeta.

Cuando se concluya la pavimentación de la calle Illia y la Venezuela pase a ser doble mano, el Distrito Vecinal Noreste tendrá un flujo importante de circulación, lo que le permitirá al municipio pensar en un cerramiento del Parque Industrial con un cerco verde, arbolado. Hoy, es un lugar de paso para los vecinos que, por acortar distancias, no tienen en cuenta el riesgo de accidentes que puede representar transitar por el área. La idea a futuro es que el Parque Industrial tenga dos ingresos, uno por Franco Saturnino y otro por Domingo Savio, con garitas de vigilancia.

– Diario Río Negro / De Cipoletti