La ex presidenta y el candidato de Cambiemos lideran las encuestas hechas tras la confirmación de las listas, aunque con variaciones. Massa está tercero.
Una semana después del cierre de listas de candidatos en la Provincia de Buenos Aires, el principal distrito electoral del país, donde en 2015 hubo diez millones de votantes, los sondeos electorales ya aparecieron en escena.
En dos encuestas, Cristina Fernández, candidata a senadora nacional por Unidad Ciudadana, pelea arriba en paridad con el candidato de Cambiemos, el ministro de Educación Esteban Bullrich.
Otros dos trabajos ubican a la expresidenta primera cómoda. Desde el entorno de la gobernadora María Eugenia Vidal, trascendieron algunos números favorables a Cambiemos.
Ni Sergio Massa, en tándem con Margarita Stolbizer en la alianza 1País, ni Florencio Randazzo, aislado en el Frente Justicialista tras la interna que le negó Cristina Fernández, aparecen disputando las tres senadurías nacionales en juego.
“Estamos cerca de los 34 puntos y tenemos a Cristina rondando los 28; el cierre de lista de candidatos no sacudió el escenario previo, según observamos en las últimas mediciones que tenemos”. Así, un dirigente bonaerense de Cambiemos, sin dar mayores precisiones, comentaba el viernes pasado a este diario el optimismo oficialista de cara a las PASO del próximo 13 de agosto.
La confianza del oficialismo bonaerense camina sobre dos patas: la imagen de la gobernador Vidal y la esperanza que aún mantiene una buena parte del electorado respecto al Gobierno nacional.
“No hay ninguna duda sobre eso», apuntó en charla con Los Andes Federico Aurelio, consultor de Aresco. “Lo hemos investigado: el 80% del votante de Cambiemos expresa su voluntad de acompañar el proyecto de Macri en Nación y de Vidal en provincia. A ese elector, las candidaturas de Bullrich y (Graciela) Ocaña (primera en la lista de diputados nacionales) le son indistintas”.
Según Aurelio, las últimas mediciones indican un panorama estable: “Cambiemos y Unidad Ciudadana se ubican en torno a los 30 puntos; sigue Sergio Massa con unos 8 puntos menos, mientras que Randazzo continúa alrededor del 7%”, enumeró el consultor.
Sobre la estrategia de Cambiemos de apoyarse en las figuras de Vidal y Macri y no tanto en las figuras de los candidatos, Aurelio agregó: “Cuidado que en un escenario de paridad, no es indiferente quién sea el candidato; un buen candidato te puede aportar esos dos o tres puntos que determinan el triunfo o la derrota”.
Para el consultor, el neurocirujano Facundo Manes, frustrado candidato por Cambiemos, “representaba una candidatura con mucha potencialidad de crecimiento”.
M&R Asociados, consultora que dirige Gustavo Marangoni, exvocero de Daniel Scioli, de quien hoy está alejado, publicó una encuesta de 1.204 casos relevados entre el 25 y el 28 de junio. El resultado dio una sólida paridad. Lo que se conoce como “empate técnico”. Un 34,8% se inclinó por Unidad Ciudadana y un 34,3% por Cambiemos.
Las candidaturas de Sergio Massa y Felipe Solá, primer candidato a diputado nacional por 1País, recibió 15,6%.
Florencio Randazzo, un 4,6%; Néstor Pitrola, candidato a senador nacional por el Frente de Izquierda, un 3,3%.
Según este trabajo, en el Gran Buenos Aires, donde la recesión económica impacta más, la adhesión a Cristina Fernández trepa a un 38% y Bullrich baja a un 31%. En el interior, donde la economía es básicamente sostenida por el campo, Cambiemos sube a 41 puntos y el apoyo a CFK baja a un 27%.
La encuesta también revela que 7 de cada 10 que votaron en 2015 a Macri, volverán a votar por Cambiemos. Algo similar ocurre con el voto kirchnerista. Mientras que el voto de 1País parece más volátil: solo 4,4 de cada 10 que votaron a Massa en 2015 lo volverían a votar en las próximas PASO. ¿Esos votos irán al oficialismo, a Randazzo? ¿Los recuperará Cristina Fernández?
La consultora Dicen, dirigida por el sociólogo Hilario Moreno, toma en cuenta los antecedentes electorales provinciales. “El kirchnerismo se mueve con un piso del 37%, que fue lo que Scioli sacó como candidato a presidente en 2015”, dijo a este diario.
Así como muchos analistas interpretan que la oposición va dispersa y esto favorece al oficialismo, el director de Dicen lo ve diferente: “Las opciones anti-K no están concentradas y ese es un universo que ronda el 45%. En estos meses hemos medido que cuando cae Cambiemos, suben Massa-Stolbizer; hay unos siete puntos que van y vienen dentro del antikirchnerismo”.
“En febrero, Randazzo medía cerca de 10 puntos; seis de ellos eran, digamos, ‘kirchneristas’. Al confrontar ahora desde afuera, esos votos se fueron a Cristina. Se separaron y Cristina se quedó con la casa, los pibes y el auto. Randazzo se quedó con 3 o 4 puntos.
Nuestros grupos focales indican que el exministro es bien visto por parte del electoral antikirchnerista”, graficó el consultor.
La encuesta de Dicen se hizo entre el 26 y 27 de junio, con 905 casos. La intención de voto a senador es encabezada por Cristina Fernández con 42%, siguen Bullrich con 26 y Massa con 14. Randazzo y Pitrola empatan con un 3%.
El primer sondeo que se conoció tras el cierre de listas fue de la consultora Analogías. Dos mil casos, entrevistas telefónicas. Según este trabajo, Cristina Fernández (a quien acompaña Jorge Taiana) se ubica con un 33,8% de intención de votos. Sigue Bullrich con un 24,1.
Massa-Stolbizer, con un 16,8%. Randazzo alcanza el 4,5% y Pitrola, el 1,5%.
Tanto desde el oficialismo como voceros de Randazzo apuntaron que la consultora Analogías “es cercana a La Cámpora”.
Un legislador nacional peronista que adhirió a la candidatura de Randazzo dijo a este diario que su sector aún no hizo encuestas. “Recién arrancamos; nuestra campaña se basará en el buen recuerdo que se tiene de Florencio como ministro: DNI, pasaportes y trenes”, comentó.
Acusan a CFK de copiar al Pro
La campaña arrancó y desde el Gobierno salieron a cruzar al kirchnerismo, recordándole su gestión y achacándole su cambio de estilo en la estrategia electoral que ha desplegado hasta el momento.
El jefe de Gabinete, Marcos Peña, remarcó que el PJ bonaerense “gobierna hace 30 años” y generó una “calamidad social por la mala gestión, por la corrupción y por consolidar un sistema que, en muchos casos, generó nichos mafiosos, incluso introduciendo el narcotráfico”.
Por su parte, el ministro del Interior, Rogelio Frigerio, consideró que la ex presidenta “está copiando” la estrategia de Cambiemos, al plantear que “faltan los globos de color amarillo en el kirchnerismo”, en tanto advirtió que “llama la atención que se olvidaron del Frente para la Victoria y La Cámpora”.
“Es evidente que está copiándonos en todo, en este intento de tener cercanía con la gente después de 12 años de un gobierno kirchnerista que se aisló”, sostuvo Frigerio sobre la ex mandataria, quien, dijo, “ahora descubre la importancia de estar cerca”.
Horacio Aizpeolea – Corresponsalía Buenos Aires – Los Andes