El intendente de Coronel Dorrego, Raúl Reyes, se entusiasma con la idea de terminar la «obra enterrada» y dar inicio a proyectos de desarrollo urbano y económico. La autopista de la ruta 3 y las oportunidades que generará.
“A este ritmo, en 4 años el 100% de la gente va a tener todos los servicios”. La región. La Nueva. Bahía Blanca
Fotos y videos: Rodrigo García – La Nueva.
Juan Ignacio Schwerdt / jschwerdt@lanueva.com
El dorreguense Raúl Reyes está cerca de hacer realidad uno de los grandes sueños de todos los intendentes: llegar con los servicios públicos básicos al 100% de la población. Falta poco, asegura. La ansiedad por llegar a ese momento se le nota en los ojos.
“Si seguimos con el ritmo de obra que arrancó con los intendentes Osvaldo Crego y Fabián Zorzano, en cuatro años vamos a llegar a toda la población con agua, cloacas, gas y energía eléctrica. Esto no sólo es bueno por los servicios en sí, sino porque nos va a permitir pensar en otro tipo de obras”, se entusiasma.
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-¿Cuál es la obra clave a ejecutar para llegar a ese 100% de cobertura?
-Sin dudas, terminar la obra de agua potable. Aún hoy, en la ciudad cabecera, seguimos entregando bidones con agua apta para consumo humano.
-¿En qué estado están los trabajos?
-En un 90% de avance. La finalización de la obra se licitó hace algunos años, con un presupuesto de 33 millones de pesos que está garantizado. Se hicieron siete perforaciones, se las dotó de energía, se ejecutó el acueducto y se conectó con la planta, y se construyó una segunda planta potabilizadora.
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-¿Será el intendente en cuya gestión la gente empiece a tomar agua de la canilla?
-¡Eso espero! Igualmente, no es relevante quién corta las cintas. El gobierno local y la Provincia fueron avanzando durante años en esta obra, y yo estaría muy contento de poder cerrar los trabajos, más allá de las dudas que nos genera.
-¿Dudas?
-Dudas propias de la operación del sistema, quiero decir. Es una obra muy grande que, una vez en marcha, tendrá un alto consumo energético y demandará muchos productos para potabilizar el agua. También tendremos que reparar las redes. Es un desafío hermoso, pero que de un día para el otro tendrá un fuerte impacto en el municipio.
-¿Qué hace falta para terminar el 10% restante?
-Hoy se están ajustando los últimos detalles y terminando de automatizar los pozos nuevos y los preexistentes. Hemos hablado con la gente del SPAR (Servicio Provincial de Agua y saneamiento Rural) y esperamos que para el invierno empiecen a hacer las pruebas. Si anda todo bien, se podrá inaugurar la obra.
-¿Qué obras proyecta para el momento en que llegue a ese 100% de cobertura en servicios?
-Paseos urbanos, ensanchar veredas, mejorar la estética de la ciudad. Ya estamos en marcha con varios de esos proyectos, de hecho. Ya lanzamos un plan para transformar en semipeatonal dos cuadras de la calle San Martín, entre Costa y Maciel, y pensamos en hacer boulevares en 16 cuadras de las avenidas Fuertes y Santagada, con plantas e iluminación.
“También vamos a ensanchar cinco cuadras de la avenida Fuertes, entre Perón y Gregorio Juárez, y vamos a completar con una obra de desagüe pluvial en Santagada, para evitar los problemas que se dan cuando ingresa agua desde la zona norte y noreste”.
-¿Qué presupuesto contemplan?
-En total, son 35 millones, pero para colocar luces led en las dos avenidas, hacer la semipeatonal y los boulevares , y ejecutar los desagües pluviales, hablamos de unos 11 millones de pesos.
-¿Cuándo arrancan los trabajos?
-Para la obra de lo boulevares ya hemos licitado la mano de obra y algunos materiales, y los trabajos están a punto de arrancar. Lo mismo pasa con los desagües pluviales. En otras tenemos que abrir un registro de oposición, pero calculamos que antes de fin de año las iniciamos todas.
-¿La financiación proviene del Fondo de Infraestructura Municipal?
-Sí, y las obras fueron consensuadas con la Provincia. Algunos municipios plantearon obras similares pero, por ejemplo, tienen al 40% de la población sin determinado servicio básico; en esos casos la Provincia les dijo no y les pidió que respeten las prioridades. A nosotros nos dijeron sí por el desarrollo que tienen nuestras redes de servicios.
-Cuando asumió dijo que uno de los ejes de su gestión sería el empleo. ¿Advierte avances en ese aspecto?
-El tema sigue siendo mi mayor preocupación. La situación es difícil por lo que se vivió en los últimos años y las medidas que Cambiemos tuvo que tomar a nivel nacional para empezar a sentar bases de crecimiento, generar confianza y atraer inversión.
“Durante años faltó inversión, y esa carencia fue absorbida por el Estado ofreciendo empleos de baja calidad. Esto demanda ahora un reordenamiento. Hasta que no pasen las elecciones va a ser difícil revertir la tendencia”.
-¿Las mejoras que ha experimentado el sector rural no han tenido efecto sobre la generación de empleo?
-Hay indicios de una recuperación. En pequeñas poblaciones como El Perdido, por ejemplo, nosotros tenemos pleno empleo.
«Lo que Cambiemos hizo con el campo, que apoyo totalmente, es sacarle el pie de encima, pero no olvidemos que el sector viene de años de una gran presión impositiva y pérdida de rentabilidad».
-¿El turismo puede ser otra alternativa para generar empleo?
-Marisol, nuestro balneario, va creciendo a pasos agigantados. Tenemos en forma permanente unas 30 construcciones en marcha, lo que nos obliga a seguir invirtiendo en servicios, apertura de calles, obras y seguridad.
“Hace 10 o 15 años los terrenos eran baratos. Hoy valen 300 mil pesos. Eso habla a las claras del futuro de Marisol».
-¿Qué obra le falta al balneario?
-La pavimentación del acceso desde Oriente, que tiene 22 kilómetros. Hemos hecho gestiones ante el ministro de Infraestructura, Roberto Gigante, y nos dio muy buenas señales, a tal punto que ya están trabajando para llevar adelante el proyecto técnico.
«La autopista de la ruta 3 es una gran oportunidad para nosotros»
-¿Qué expectativas le genera el proyecto de una autopista en la ruta 3 entre Bahía Blanca y Coronel Dorrego?
-Muy buenas. Con Bahía tenemos una relación diaria. Allí vamos a estudiar, al médico, a ver familiares, a pasear.
-¿Hay quienes lo pueden ver como una amenaza?
-Las amenazas ya existen desde que Dorrego se fundó a una distancia equidistante de Bahía y Tres Arroyos.
-¿Y entonces?
-Yo prefiero ver fortalezas y oportunidades. Prefiero fijarme en que estamos a 85 kilómetros de un puerto de aguas profundas. Eso es una gran oportunidad para nosotros. Una autopista va a generar más seguridad, va a ahorrar tiempo y va a mejorar los fletes y la competitividad.
-¿De qué manera Coronel Dorrego puede aprovechar la vinculación con Bahía Blanca mediante una autopista?
-Nosotros somos productores de materias primas. Siempre ronda en la cabeza de todos los dirigentes agregarle valor, industrializarlas. Podríamos empezar por ahí.
-¿Piensa en agún sector en particular?
-Bueno, nosotros tenemos un frigorífico en el parque industrial que hoy está cerrado. En los últimos años se perdieron 10 mil puestos de la industria cárnica nacional, pero ahora la situación es otra y nosotros tenemos muy buena ganadería en esta zona. Aquí la podríamos faenar, procesar, refrigerar, poner en una bandejita y llevarla a Bahía y Monte Hermoso.
“Acá también tenemos empresarios chicos de sector metalúrgico que son muy buenos. Hoy la industria metalmecánica se concentra en Córdoba, Santa Fe y el norte de Buenos Aires, y toda la maquinaria agrícola se hace allí, pero aquí se podría empezar desarrollar la industria”.
-¿Y la olivicultura?
-También es una gran opción, más allá de que, en muchos casos, sigue siendo una actividad complementaria a las actividades principales, que son la producción de trigo, cebada, carne y, en estos últimos tiempos, el maíz.
-Se refirió al sector industrial. ¿En qué medida se ha desarrollado?
-Muy poco. Por eso en 2016 impulsamos algunos cambios, a fin de generar mayor compromiso y seriedad por parte de las empresas que vienen a solicitar un espacio. Ya no entregamos los lotes a valor simbólico, sino al 40% de su valor de mercado, y a quienes compran les exigimos que presenten un proyecto que se cumpla en no más de tres años. Recién después se escritura.
«Demostramos que los municipios pueden hacer viviendas»
-¿Cómo marcha el Plan Municipal de Viviendas?
-Muy bien. Es un plan que surgió en un momento en que la Provincia y la Nación no nos acercaba ninguna solución en materia habitacional, y nos dio muy buenos resultados.
«Yo era concejal cuando nació la idea, y logramos convencer al entonces intendente Fabián Zorzano de avanzar con un programa municipal».
-¿Cuántas casas han inaugurado hasta ahora?
-Hoy tenemos a 30 familias viviendo en casas que hizo el municipio, lo que para nosotros es un orgullo, y otras 10 unidades más que están arrancando. El 27 de abril se firmó la hipoteca de esos 10 terrenos a favor del municipio. En marzo del año que viene las viviendas estarán culminadas y terminadas.
-¿Bajo qué modalidad se construye?
-Por ahora, el beneficiario aporta el terreno y el municipio levanta la casa.
-¿Es bueno el nivel de cobro de las cuotas?
-Sí. La gente cumple. Hay quienes tienen demoras o alguna complicación, pero los convocamos, les damos facilidades y llegamos a un acuerdo. El recupero es lo que nos permite construir más casas; intentamos que todos entiendan esto.
-¿A cuánto asciende hoy el valor de las cuotas?
-Nunca superan el de un alquiler. Son unos 1.500 pesos por mes por una casa de 62 metros cuadrados, de buena calidad.
-Al cabo de los años, usted puede dar fe de que los municipios pequeños o medianos sí pueden llevar adelante planes de vivienda…
-Por supuesto que se puede. Nosotros lo hemos logrado con un programa que funciona muy bien, orden y transparencia. Estamos muy satisfechos con esto.
-¿En qué estado se encuentra la adjudicación de las 24 casas del plan Buenos Aires Hogar?
-Ya hicimos la preselección de beneficiarios y estamos esperando que determinen quiénes serán los adjudicatarios.
-¿Y con los planes Solidaridad y Techo Digno?
-En ambos casos se hicieron todos los trámites administrativos, así que creemos que vamos a poder licitar en breve las 32 casas del Solidaridad y otras 30 del Techo Digno distribuidas entre Dorrego, El Perdido y Oriente.
«La gente no quiere volver a todo lo que pasó»
-¿Cómo ve a Cambiemos?
-Yo soy optimista. Creo que vamos a andar bien, dentro del contexto que nos toca vivir y sabiendo que hubo que tomar medidas para sentar bases de crecimiento, dejar de mentir y echar un manto de luz sobre problemas que nos duelen a todos.
-¿Y en Dorrego?
-Aquí tenemos una fuerte base radical y, junto a las otras expresiones políticas de Cambiemos, como el Pro, vamos a hacer todo lo posible para hacer una lista de unidad.
-¿Tiene confianza en hacer una buena elección este año?
-Vamos a tener una buena elección si somos capaces de explicarle a la gente qué hicimos y por qué lo hicimos, pero sobre todo cómo nos manejamos. La gente no quiere volver a todo lo que pasó.
-¿Cree que la gente está satisfecha con su gestión?
-Tengo mucha relación con los vecinos y las instituciones, y humildemente puedo decir creo que sí. En este año y medio la gente me pudo conocer y ver que tengo predisposición para dar continuidad a los proyectos que son importantes para la gente.
-¿Se siente identificado con Cambiemos?
-Cambiemos ha venido a hacer, a nivel nacional y provincial, lo que en la intendencia de Dorrego se hace desde hace años: no alterar el orden de las prioridades, que son el empleo, la seguridad, la salud. Sobre esta base se construye todo lo demás.
– La Nueva Provincia