El partido opositor cree que es un «artilugio» promulgar la enmienda votada en 2009 para que los jefes comunales no tengan más de dos mandatos consecutivos. También lo considera una «represalia» del gobernador. Sugiere que se vote de nuevo en las próximas elecciones.
Hay tensión entre el gobernador y los intendentes del PJ por la intención de frenar las reelecciones en las comunas. (Foto Gobernación )
El peronismo mendocino marcó su oposición respecto de la propuesta de limitar las reelecciones de los intendentes a través de la promulgación de una enmienda votada por los mendocinos en 2009.
Se expresó de esa manera, entre otros, el intendente de San Rafael, Emir Félix, quien consideró que la idea representa un «artilugio jurídico» y propuso en cambio que el Gobierno provincial someta a votación en la Legislatura una nueva enmienda que diga lo mismo.
En el justicialismo creen que la iniciativa radical es una especie de represalia por la negativa del PJ a avalar la reforma amplia de la Carta Magna que militaba el Gobierno.
«Tiene todo el color de ser eso», se sinceró un jefe comunal. Este tipo de voces se escucharon en la previa de un congreso partidario que se realizará en San Martín este sábado, y en el cual, a pesar de no estar en la agenda, podría haber alguna manifestación al respecto de la propuesta de los radicales sobre las reelecciones.
La idea de limitar la reelección de los intendentes por la vía más rápida surgió de los caciques oficialistas. Todos los que componen Cambia Mendoza (13 en total) firmaron la nota para que Alfredo Cornejo promulgue la enmienda de hace 8 años, que obtuvo una holgada diferencia a favor del «Sí».
Aquella reforma obtuvo más del 80 por ciento de los votos, pero no la mitad más uno del padrón general. Por eso no fue promulgada por el entonces gobernador Celso Jaque.
A pesar de ello, los intendentes cornejistas creen que es constitucional promulgarla. Cornejo se lo había pedido cuando no era gobernador a su antecesor, Francisco Pérez; y ahora les hizo un guiño a sus intendentes para avanzar.
La víctima principal de esta maniobra sería el PJ, ya que los cinco intendentes que mantiene este partido han sido reelegidos y no podrían acceder dentro de dos años a otro periodo.
«Es una idea berreta, para forzar una reforma muy pandita», dijeron en el cuartel peronista. Y recalcaron que «la población enterró» la reforma de 2009 en otra elección.
Se refirieron de ese modo a la enmienda de 2011, año en el que se intentó modificar el artículo 221 de la Constitución para que quedara claro que hace falta la mitad más uno de los «votantes», no de los «electores», para reformar la Carta Magna.
Ese cambio no tuvo aval de la ciudadanía y por lo tanto, para los justicialistas, sigue rigiendo una especie de cepo para las reformas constitucionales, sintetizado en un fallo de la Corte provincial.
El fallo es de 1989 y defiende el criterio de que son los electores quienes deciden si la reforma avanza o no, no las personas que efectivamente asisten a una votación.
Algunos peronistas hablaron en los últimos días de un «manoseo» del voto de la gente e incluso sostuvieron que sería un «escándalo» que la Corte avalara la promulgación de la enmienda de 2009.
Estas expresiones demostraron que la esperanza de los justicialistas es que el alto tribunal frene esa idea, si es que Cornejo insiste en jaquear a los intendentes con el bloqueo a sus reelecciones.
Eso sí, conscientes del impacto que tiene en la ciudadanía, ningún peronista habló a favor de que los intendentes se reelijan. «Me cago en las reelecciones, pero si quiere hacerlo, tiene que mandar otra enmienda y pedir antes que la Corte aclare el tema de los votos», bramó un intendente del PJ. La relación con Cornejo se encuentra en un momento de tensión.
Reunión clave por el voto electrónico
La cuestión de la reelección de los intendentes no es el único punto a resolver antes de las próximas elecciones. El Gobierno debe, además, definir si se podrá aplicar el voto electrónico en los comicios de este año.
La reforma electoral estableció que el 30 por ciento del padrón utilizará ese sistema, pero luego, el gobernador Cornejo fijó por decreto que las elecciones provinciales serán «simultáneas» con las nacionales. De ese modo, no sólo se votará el mismo día, sino que regirá el código nacional, que mantiene el voto con lista sábana.
Durante la semana hubo algunos contactos del Poder Ejecutivo con el juez electoral Walter Bento para encontrar una solución a este problema. Se la seguirá buscando este lunes, con una reunión de la que participará el propio secretario de Asuntos Políticos del Ministerio del Interior, Adrián Pérez.
El Gobierno espera que Pérez traiga una parte de la solución: la económica. Sucede que el voto electrónico es bastante más caro que el tradicional (6 dólares por sufragio) y la administración de Cornejo quiere que el Gobierno Nacional absorba ese gasto.
– MDZ on line