En audiencia pública, Nación propuso un aumento de 22,5% del llamado gas “en boca de pozo”. El impacto sobre la factura recién se conocerá el 31 de marzo.
Ayer se llevó a cabo la audiencia pública para tratar los nuevos aumentos del gas natural en el Punto de Ingreso al Sistema de Transporte (PIST), conocido como “en boca de pozo”. El ministro de Energía, Juan José Aranguren, ratificó el sendero propuesto por el gobierno el año pasado: el incremento, entre abril y octubre, será de 22,5%. A nivel nacional, el precio del gas en boca de pozo saltará de u$s 3,42 a u$s 4,19. En la Patagonia, que cuenta con el beneficio de una reducción más gradual de subsidios, el valor aumentará de u$s 1,29 a u$s 1,48 (abril) y a 1,69 (octubre). El porcentaje de aumento sobre la factura residencial recién se sabrá el 31 de marzo y se dividirá en tres tramos.
Advertencia preliminar: por falta de comunicación efectiva o por verdadera complejidad técnica, el aumento de gas se ha vuelto un tema definitivamente engorroso. En septiembre del año pasado, fue la primera audiencia pública en la que se trató la suba del gas PIST y cuyo precio rige desde octubre del 2016. En aquella oportunidad el ministerio estableció un sendero de reducción semestral de los subsidios sobre el precio del gas. Ayer, lo ratificó.
En la mayor parte del país, los subsidios bajarán de 50 a 45% del precio en abril, y a 38% en octubre. En la Patagonia, Malargüe (Mendoza) y la Puna, la baja será de tres puntos, de 81 a 78% (abril) y a 75% (octubre). Los precios convergerán gradualmente al precio de mercado desregulado (6,72 dólares/MMBTU) en un período de 6 años en la Patagonia, en lugar de los tres previstos para el resto del país.
Así, en la Patagonia, el actual 1,29 dólares/MMBTU pasará u$s 1,48 a partir del 1° de abril de 2017 y a u$s 1,69 en octubre. Para el resto del país, el precio de gas en boca de pozo, ahora en 3,42 dólares, pasará a u$s 3,77 a partir del abril; y a u$s 4,19 a partir de octubre.
Según explicó Aranguren, el precio gas en boca de pozo representa un 40% del valor de las facturas. El transporte y la distribución representan un 32% de las boletas y el 28% restante son impuestos. En diciembre pasado, se trató en audiencia pública la recomposición del precio de transporte y distribución, pero todavía no se trasladó a las facturas. Ahora, tras la audiencia, el ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) tendrá a su cargo la determinación de los incrementos finales.
El 31 de marzo se sabrá cuál será el porcentaje de aumento que deberán pagar los usuarios y que incluirá la suba del gas en boca de pozo dispuesta este año y la distribución y transporte fijado en diciembre del año pasado. Ese aumento se dividirá en tres tramos. Es decir, que s i la suba es de 100%, el 30% se pagará en abril, el 30% en noviembre y el 40% restante en abril del año que viene.
Para sumar complicaciones, ayer por la mañana una frase de Aranguren durante la audiencia desató la confusión. El ministro dijo que se establecieron topes de aumento para las facturas del servicio de gas superiores a $ 250: los incrementos no pueden superar el un tope 300 y 500% según la categoría y respecto al mismo período del año pasado.
“No significa que el aumento que se va a anunciar el 31 de marzo va a ser de 500%. Ese es el tope para quien se pase de mambo con el consumo. Es decir, a quien consuma mucho más que el año pasado se le podrá cobrar hasta un 500% más que el mismo período del año pasado”, aclararon voceros de Aranguren a este diario, visiblemente enojados.
Datos
40%
del valor total de las facturas representa el precio del llamado “gas en boca de pozo”, o gas en origen.
u$s 1,69
pasará a costar la unidad de gas en la Patagonia a partir de octubre. Habrá perdido seis puntos de subsidio de Nación.
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