Contrariando la legislación local vigente, por estos días el paisaje urbano se ve empañado por una innumerable cantidad de pasacalles que promocionan a los diferentes candidatos y partidos políticos con vistas a las elecciones de octubre próximo.
Si bien aún restan más de cuatro meses para las elecciones y la ordenanza que regula la colocación de pasacalles políticos autoriza su instalación recién 60 días antes de las mismas, es evidente que en esta ciudad se transgrede la norma de manera recurrente.
La ordenanza señala la prohibición de colgar pasacalles en plazas y plazoletas, como tampoco se puedan fijar en jirafas o postes del tendido eléctrico, aspectos que saltan a la vista no se cumplen. La legislación también contempla multas de 10 unidades fijas (100 litros de nafta común) a los infractores, una modalidad similar a lo estipulado para quienes infringen las normas de tránsito.
– EL TERRITORIO