Equipos técnicos comunales analizan proyectos para el tramo del Paraná entre Timbúes y Villa Constitución
El estado de conservación de la costa del río Paraná en el tramo comprendido entre las localidades de Timbúes y Villa Constitución fue el motivo de una reunión de equipos técnicos de los distintos gobiernos locales, que encabezó en esta ciudad la vicegobernadora María Eugenia Bielsa.
Según los organizadores del encuentro -que ya tiene varias ediciones- se busca unificar políticas de recuperación de la costa de cada jurisdicción a través de proyectos generados desde sus respectivos municipios, para lo cual se intentará obtener un financiamiento que provenga tanto del Consejo Federal de Inversiones de la Nación como de créditos internacionales.
En este proyecto no está incluido el municipio de Rosario por cuanto éste ya posee una política propia de recuperación del área costera, algo que no ocurre en las otras localidades que componen las zonas industriales ubicadas al norte y al sur de la urbe rosarina.
Para el gobierno provincial resulta de fundamental importancia que sean los gobiernos locales los que elaboren sus proyectos de obras y emprendimientos para la costa metropolitana, generando un banco de datos para que se compatibilicen y alcancen un consenso integral.
La agenda abarcó además una serie de puntos de discusión, como la armonización entre las políticas destinadas a las áreas residenciales y las destinadas a la producción que caracteriza al cordón; los emprendimientos turísticos, y la regulación para nuevas instalaciones en el marco del cuidado del medio ambiente.
En ese sentido, la presidenta del Senado provincial sostuvo la necesidad de «tomar todas las prevenciones para cuidar nuestro ecosistema» y remarcó que «la acción del hombre debe tener un profundo compromiso con la cultura y con las cuestiones ambientales».
Bielsa puso énfasis en resaltar a los funcionarios presentes que «el nuestro es un país que siempre trabajó sobre las cuestiones coyunturales, estoy convencida de que ha llegado el momento de que nos pongamos a pensar en objetivos a largo plazo».
Impacto ambiental
Al referirse con precisión al auge de las radicaciones industriales que se experimenta sobre los sectores costeros y las implicancias que tienen sobre el medio ambiente, la vicegobernadora sostuvo que «no es lo mismo instalar una planta habiendo estudiado todas las condiciones ambientales, las demandas de forestación, la relación con el río Paraná y el tratamiento de los efluentes, que llegar después que la agresión a la naturaleza ya se ha consumado».
Por su parte, el intendente anfitrión, Fabián Varela, señaló que «esta serie de reuniones técnicas hace ya algún tiempo que las venimos realizando entre los municipios y comunas del cordón», y agregó que «el aprovechamiento de la costa es una preocupación que compartimos, motivo por el cual creemos que no resulta conveniente buscar una salida en forma individual; por el contrario el agrupamiento de nuestros técnicos es lo más positivo».
A lo largo del encuentro siempre estuvo en claro que las regulaciones sobre la utilización de los sectores costeros corresponden a cada gobierno local, por cuanto la realidad de la costa es diferente en las distintas localidades, donde en algunas casi todos los espacios están ocupados por puertos o emprendimientos productivos y de servicio, mientras que en otras todavía queda una gran franja de uso público, recreativo o residencial.
En algunos casos la urgencia son las obras de preservación, como ocurre con la barranca a la altura de San Lorenzo, mientras en Capitán Bermúdez y Granadero Baigorria el aprovechamiento turístico guarda un verdadero potencial para desarrollar.
Modelo testigo
El proyecto propuesto por Bielsa tiene como modelo testigo el impulsado por el senador Armando Traferri para la protección de la barranca del Campo de la Gloria y el mejoramiento del histórico predio, próximo a ejecutarse con un presupuesto de 18 millones de pesos luego de un trabajo conjunto entre el Ministerio de Asuntos Hídricos de la provincia y la Municipalidad.
Esa obra no sólo protegerá la costa sino que a su vez recuperará cerca de 25 metros que el río le había ganado al terreno y prevé un paseo costanero vehicular y peatonal con una serie de terrazas para realzar el paisaje.
El sistema se complementa con la realización de veredas, bicisendas, miradores y un puente metálico, barandas de protección y una iluminación compatible con el entorno.
Marcelo Abram – La Capital