La hará una firma bahiense por un costo de 21 millones de pesos. La decisión fue del intendente Cristian Breitenstein, luego de que el gobierno nacional se comprometió a aportar el 50% del monto total. Los trabajaron empezarían este mismo año.
Lejos de lo que parecía ser un nuevo golpe a la infraestructura de la ciudad y otro fracaso del proceso licitatorio de una de las obras más requeridas en la ciudad, el intendente Cristian Breitenstein decidió adjudicar a la empresa bahiense Beltrán Ingeniería SA la construcción de la nueva terminal de ómnibus.
Su costo está estimado ahora en unos 21 millones de pesos y la novedad clave será afrontado, en partes iguales, por la comuna y el gobierno nacional.
Este último aporte (de 10.500.000 pesos) quedará rubricado en los próximos días, durante un encuentro que mantendrán el presidente de la Nación, Néstor Kirchner, y el jefe comunal en la Casa Rosada.
Se trata de la concreción de la mayor obra pública municipal desde 1969, cuando se levantó el mercado de la calle Donado al 100.
La decisión de Breitenstein de adjudicar la obra a la firma bahiense es el resultado de una serie de hechos legales y administrativos que se inició con un dictamen de la comisión de Preadjudicación, desestimando la oferta presentada en la licitación por la unión transitoria de empresas (UTE) Codam SRL-Enrique Sanandrés Rivas, establecida en Neuquén.
Luego se llegó a un acuerdo con Beltrán Ingeniería SA vinculado con una baja en la cotización y otros conceptos, para alcanzar los 21 millones finales.
Según pudo saber ayer este diario, el monto total de la obra, que representa 9 millones de pesos menos que los que había cotizado inicialmente Beltrán Ingeniería, deberá ser comunicado oficialmente mañana al secretario de Obras Públicas de la Nación, ingeniero José Francisco López.
Textual
«El gobierno nacional aportará el 50% de la nueva terminal; es decir, 10.500.000 pesos. Todo esto será firmado en unos diez días, en la Casa Rosada, entre el presidente Kirchner y Breitenstein». De una alta fuente municipal.
– La Nueva Provincia