El titular de Economía ratificó el plazo para acogerse a la regularización, el remate de un inmueble y que estudia identificar a los morosos.
«Estamos analizando la posibilidad de publicar, ya sea en una página web de la Municipalidad o en otro lugar, los principales contribuyentes con deuda, al término de esta moratoria. Lo vamos a hacer con nombre y apellido, seguramente».
Las palabras pertenecen al secretario de Economía y Hacienda de la comuna, Guillermo Aispuro, quien fue consultado, durante la víspera, sobre la adhesión al plan de cobro de deudas lanzado por el municipio.
Además, señaló que no está planificado prorrogar la fecha de finalización para adherir a la moratoria que se mantiene vigente para deudas con la comuna por todo concepto.
Al margen de la afirmación del funcionario, no son pocos los rumores que indican lo contrario y que el plazo para el acogimiento a un plan de regularización, fijado para el 31 de este mes, se extendería para captar a quienes piensan cancelar sus obligaciones con el venidero cobro de sueldos.
«En principio –aclaró el secretario–, no tenemos establecido una fecha posterior al 31 de agosto. Por eso, recordamos a los vecinos de Bahía Blanca el vencimiento del plan de regularización de obligaciones con la Municipalidad».
En cuanto a la adhesión de los contribuyentes morosos, la calificó de «bastante importante».
«La adhesión es bastante importante. Nosotros seguimos siendo optimistas, porque se puede apreciar que la cantidad de gente que está concurriendo es muy significativa», señaló.
Comentó que, además de ofrecer todas las modalidades de pago que están previstas en la ordenanza respectiva, es posible que se extienda el horario de atención al público, por la tarde.
«Tenemos deudas correspondientes a inmuebles de todo tipo, de contribuyentes con una capacidad económica importante y de aquellos que no la tienen», expresó Aispuro.
Las expectativas del titular de Economía, en cuanto a la recaudación por la moratoria, a 20 días de estar en vigencia, siguen siendo «optimistas» aunque aclaró que no tiene una estimación basada en datos oficiales.
«Con los pocos datos que estamos manejando, las mayores adhesiones a la moratoria se dieron en la tasa por Seguridad e Higiene», señaló.
Remate.
Aispuro dijo que la comuna está en condiciones de afirmar que el 16 de septiembre está previsto el remate de un inmueble ubicado en calle Mallea al 1.100, «de un contribuyente con una deuda significativa.
«El titular no se ha acercado a cancelar sus obligaciones. Este es el primer remate, pero aclaramos que no queremos quedarnos con esa alternativa», destacó.
Según el funcionario, la subasta podrá ser suspendida si el contribuyente se acoge a la moratoria vigente.
Tasa Ambiental.
El secretario de Economía comentó que, hasta el momento, no recibió información o instrucciones oficiales en cuanto al aumento de la tasa Ambiental, que abonan las industrias de tercera categoría emplazadas en el sector portuario-industrial de Bahía Blanca, para solventar los gastos de su control y monitoreo, a cargo del Comité Técnico Ejecutivo (CTE) municipal.
La posibilidad de que se implemente este incremento fue manifestada por el propio intendente Cristian Breitenstein, aunque aclaró que, en primer término, enviará un proyecto al Comité de Control y Monitoreo (CCyM), integrado por diferentes entidades y organismos, para, luego, presentarlo en el Concejo Deliberante.
Otras previsiones y datos
Ernesto Hernández, quien se encontraba al frente de la cartera municipal de Economía a principios de este mes y fuera sucedido en el cargo por Aispuro, había anticipado que la comuna esperaba recaudar entre 10 y 11 millones de pesos, con la moratoria implementada.
Adriana Valero, directora de Rentas de la comuna, expresó que, sumando todas las deudas por tasas, derechos, licencias, contribuciones y otros tipos de obligaciones exigibles, al municipio se le deben alrededor de 50 millones de pesos nominales.
Asimismo, manifestó que, de acuerdo con la adhesión de los deudores en anteriores moratorias, puede esperarse que, en esta oportunidad, se acoja alrededor del 40 por ciento de los mismos, a alguna modalidad de pago.
Las opciones para acogerse a un plan son las siguientes:
* Contado: Condonación del 80 por ciento sobre recargos e intereses.
* Opción 1: Pago en tres cuotas mensuales, iguales y consecutivas, con condonación del 70 por ciento sobre recargos e intereses.
* Opción 2: Pago en cinco cuotas mensuales, iguales y consecutivas, con condonación del 60 por ciento sobre recargos e intereses.
* Opción 3: Condonación del 50 por ciento sobre recargos e intereses. Pago del 30 por ciento de la deuda en cinco cuotas mensuales. El 70 por ciento restante se abonará en 48 cuotas, con el 1 por ciento de interés.
Quienes adhirieron a anteriores moratorias y no cumplieron con los pagos pueden convenir un nuevo plan, en el marco de la actual.
En el caso de contribuyentes cuya situación económica les imposibilite adherir al plan en las condiciones fijadas anteriormente, lo cual deberá quedar debidamente corroborado, el Departamento Ejecutivo podrá establecer una modalidad diferencial sin exigencia de anticipos financieros, debiendo abonar el monto de la deuda liquidada en 60 cuotas iguales, mensuales y consecutivas, sin intereses de financiación.
En este caso, se condonará el 10 por ciento de intereses acumulados a la fecha de acogimiento.
Las cuotas y anticipos que se determinen en cualquiera de las modalidades contempladas en la moratoria no podrán ser inferiores a diez pesos.
La mora en el pago de dos cuotas consecutivas o tres cuotas alternadas producirá, sin más trámite, la caducidad automática del plan de pagos, incluidos los beneficios otorgados por aplicación de la ordenanza.
Producida la caducidad, sin más trámite, el municipio iniciará o continuará las gestiones judiciales para el cobro de la deuda total impaga.
– La Nueva Provincia