
La misión de empresarios argentinos encara una semana de contactos y negocios en la OTC, principalmente con proveedores norteamericanos, con un ojo puesto en los SIRA y la falta de dólares en el país.
Los empresarios que inician proceso de importación podrían acceder a mecanismos tipo linked con dólares financieros, «pero el precio es más del doble que el dólar oficial y no puedo cargar ese costo al cliente porque sería impagable».
«Hace 25 años que no se ve una situación similar», agregó Marcela Frattini, de Transaltic, empresa dedica a la logística, durante el cocktail organizado por la Cámara Argentino Texana en St. Andrews Brewery.
Incluso, desde la cámara organizadora del evento al que asistieron más de 200 representantes de empresas, aducen que el tema es complejo porque «es inentendible que la burocracia frene algo que nos puede beneficiar a todos».
El representante comercial de una operadora que participó del Pre OTC cocktail reveló que, conscientes de la situación, muchas empresas majors asumen hasta el 30% de los costos financieros que las pyme proveedoras deben afrontar para conseguir sus insumos. «Lo incorporamos al costo, e incluso intervenimos frente al Estado para que agilice las SIRA y poder seguir operando» detalló al tiempo que admitió que la mayor parte de las operadoras de la cuenca trabajan de la misma forma para no frenar la inercia de la cuenca.
La estrategia de otras empresas es establecer una suerte de «canal verde» que le permite al menos agilizar el movimiento de mercaderías entre ambos países. Duralite, con sede principal en Houston, explicó que no tienen problemas más allá de las demoras naturales que implica llevar materiales a la argentina. La neuquina Equipel, por ejemplo, trabaja con las filiales argentinas de sus proveedores, que son quienes en definitiva afrontan los costos aduaneros de las importaciones de materiales eléctricos.
El otro esquema utilizado por algunas empresas, según agregó la propia Frattini, es «trabajar con proveedores asiáticos», debido a las posibilidades que abren los acuerdos comerciales, principalmente con China. Esta opción, claramente, es ventajosa en términos financieros, pero la utilidad de los productos fabricados en el gigante asiático, según dicen los empresario, es acotada y no siempre tienen la prestancia u originalidad de los fabricados en occidente.
En todo caso, otras pymes neuquinas, atadas al contexto macroeconómico y regulatorio laberíntico, optan por poner en la balanza la posibilidad de abrir sucursales en territorio norteamericano y así aligerar los tiempos muertos entre compras y ventas de los insumos necesarios.
El problema que enfrentan muchas Pymes que prestan servicios en la cuenca (como en todo el país) no es la falta de recursos para afrontar las compras, sino el impacto de la brecha cambiaria, la burocracia normativa y el cierre de importaciones por falta de dólares. Este escenario es el que fundamenta el reclamo del sector, con fuerte respaldo de los estados provinciales, para que se elabore un «dólar Vaca Muerta», algo que por el momento parece lejano.