Crece el interés por el uso y control de los ingresos de los fideicomisos mineros

MAYOR RECAUDACIÓN Y EXPECTATIVAS POR LA FIEBRE MUNDIAL DEL LITIO

Ante la consulta de la oposición, el ministro de Minería explicó las razones del aumento en la recaudación y aseguró que las normas de transparencia pueden mejorarse.

Por el aumento en la recaudación y el mayor interés mundial en el litio, conocido como «la fiebre del litio», creció el interés por conocer los detalles del uso y especialmente el control de los recursos que se canalizan por intermedio de los fideicomisos mineros que tiene Catamarca, hoy vinculados a la explotación del proyecto Fénix, administrado por Livent, pero que podrían multiplicarse por seis en los próximos años.
Además, planteó la falta de un plan de desarrollo. «Cuando se justifican las inversiones se menciona ‘a pedido del municipio tal’. En ningún momento hay un plan provincial de desarrollo sobre el uso del recurso hídrico, o la recuperación de ferrocarriles, por decir ejemplos. No digo que sean malas acciones, pero no están enmarcadas en un plan», apuntó el diputado.El ministro Murúa aprovechó la oportunidad para explicar que hubo un crecimiento en los recursos vinculado al boom de la electromovilidad en el mundo, valoró el aporte de Manzi y se mostró a favor de mejorar las políticas de transparencia de los fideicomisos.

«Catamarca tiene un acuerdo con Livent que se fijó en un porcentaje de la facturación como aporte. En 2022, con las regalías de ley y su facturación, Livent tendría que haber pagado 299 millones de pesos. Con el acuerdo actual se obtuvieron 1.400 millones de pesos en concepto general», indicó el ministro.

En esa línea, explicó que Livent paga su regalía con la facturación que emite a AFIP, pero a Catamarca le paga los aportes según el precio más alto entre el de facturación y el de mercado. «Desde que el precio de mercado superó al precio de facturación, Catamarca cobra sus aportes por esa referencia. Livent emite su facturación, se hace una consultoría del precio de mercado que puede demorar 30 o 40 días y se produce una reliquidación a la Provincia. Sin contar la reliquidación de diciembre, obtuvimos 1.750 millones de pesos. Sin embargo, el precio de mercado se alejó del precio de facturación en los últimos períodos: eso no pasaba cuando Livent era el único productor, ni cuando no había este boom de electromovilidad que levantó la demanda a nivel global y disparó el precio por la poca oferta», graficó Murúa ante los legisladores nacionales.

Además, aseguró que se hicieron auditorías sobre el sistema de cálculo y «no arrojó diferencias con lo recaudado».

Sobre la transparencia de esos recursos, Murúa explicó que hay dos fideicomisos. Uno, el fideicomiso donde se depositan los fondos de regalías mineras, «fue una herramienta propuesta por la oposición y no queda exenta del contralor de la Administración Pública. Se dictó el decreto de creación de una comisión que está a cargo de establecer el plan estratégico de obras y depende del Ministerio de Planificación, Trabajo y RRHH. Tienen representación las cámaras empresariales, los senadores, los intendentes y se vinieron realizando reuniones informativas a los fines de desarrollar ese plan. Hoy los fondos son solo del proyecto Fénix, pero apuntamos a multiplicar por seis los recursos porque tenemos otros proyectos en marcha», indicó.

El otro es el fideicomiso Salar del Hombre Muerto, que surgió de un reclamo de la Provincia porque el proyecto Fénix nunca había pagado el canon de agua, por lo que se hizo un planteo judicial. «Se fijó un acuerdo transaccional por un porcentaje que es del 1,2% de la facturación. Allí Livent tiene dos integrantes, hay un comité directivo que decide las obras y la mayoría se hizo por audiencias en las comunidades mineras y a pedido de la población. El sistema se puede optimizar, incluso legislar al respecto», sostuvo

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