Ciudad de Córdoba: qué pasará con la regularización de los barrios con seguridad

Hay decenas de barrios «cerrados» que deberían estar abiertos, ya que existe ninguna normativa donde encuadren

Hay decenas de barrios «cerrados» que deberían estar abiertos, ya que existe ninguna normativa donde encuadren (foto, ilustrativa).

En julio del año pasado, el Concejo Deliberante comenzó a debatir un proyecto de ordenanza que buscaba regularizar a barrios que deberían ser abiertos de acuerdo a la normativa vigente, pero que mantienen sus límites y accesos cerrados.

En las semanas siguientes, la discusión se tornó interesante, con algunos apoyos por parte de desarrollistas y con fuertes críticas por parte urbanistas, arquitectos, docentes y especialistas en desarrollo urbano. Lentamente, la iniciativa comenzó a perder impulso y terminó 2022 sin que llegara al recinto para su aprobación o rechazo.

El proyecto es del concejal Marcos Vázquez, presidente del bloque de Hacemos por Córdoba, el oficialismo en el Legislativo de la ciudad. Son coautores sus compañeros de bancada Pablo Ovejeros, Natalia Quiñónez e Ileana Quaglino.

Proponen un “Régimen de Regularización para Loteos con Perímetro Controlado”. Es que en la Capital no hay ninguna ordenanza que permita la existencia de “barrios con seguridad”; sin embargo, proliferaron en los últimos 20 años. Sí existe la ordenanza de Urbanizaciones Residenciales Especiales (URE), que permite el cerramiento de loteos, pero con terrenos que deben tener mil metros cuadrados dentro de Circunvalación y 1.500 metros si están afuera. Los denominados “countries”.

Pero por inacción de la propia Municipalidad se multiplicaron con lotes de 350 metros cuadrados o menos que instalaron garitas de seguridad y algún tipo de cerramiento en calles, interrumpiendo la trama urbana. Esa situación es ilegal: por la normativa vigente, el municipio debería obligarlos a retirar esos cercos y que se integren al resto de la ciudad.

El proyecto permite que, si cumplen una serie de condiciones, esos loteos sean “asimilados” a la ordenanza 8.606, que es la regula las (URE).

Esos requisitos son la aprobación final del loteo, una consolidación de al menos el 50 por ciento de las viviendas ejecutadas, que a su vez deberán contar con permiso de edificación expedido por el municipio. Otro de los puntos fundamentales tiene que ver con la seguridad: deberán contar con vigilancia de 24 horas durante los últimos cuatro años.

También que tengan dos ingresos, uno principal y otro alternativo, como mínimo.

APOYOS Y RECHAZOS
Residentes de esos barrios y algunos empresarios desarrollistas celebraron la iniciativa. Los primeros, para regularizar una situación que se arrastra desde años y que cada tanto los tiene bajo la amenaza de levantar las barreras y los cercos perimetrales. Los segundos, porque les permite blanquear un esquema urbanístico que nació siendo ilegal y que pese a no cumplir con las ordenanzas vigentes, proliferó y se multiplicó en la ciudad.

campo de vuelo 3
Loteos “con seguridad” en Córdoba capital: especialistas advierten sobre ilegalidad de la iniciativa
Por otro lado, cosechó fuertes críticas de sectores universitarios y de especialistas en urbanismo, como representantes de las universidades, la Sociedad Argentina de Planeamiento Territorial y hasta del Colegio de Arquitectos de Córdoba.

Originalmente, los autores querían que se tratara en el recinto la primera quincena de agosto. Pero ante el escenario adverso, el debate fue perdiendo intensidad y la comisión de Desarrollo Urbano del Concejo, presidida por uno de los autores de la propuesta, Pablo Ovejeros, no emitió ningún dictamen en 2022.

QUÉ SUCEDERÁ
Fuentes vinculadas a Hacemos por Córdoba comentaron a La Voz que la intención es hacer un tanteo en los bloques opositores, para ver si se consigue un consenso que exceda al oficialismo.

Los autores ya habían anticipado cambios: no serían incorporados como URE, sino que las calles y los espacios verdes continuarán siendo públicos y los accesos seguirán siendo “controlados”, pero no privados. Es decir que cualquier vecino podría ingresar a esas urbanizaciones y utilizar los espacios públicos, si así lo deseara.

Sin embargo, la oposición ya había planteado fuertes reparos. Desde el radicalismo, veían una estrategia electoralista para sacarle votos a un público que, según entienden, votarían por Juntos por el Cambio. Si esa era la mirada en 2022, difícil que se modifique este año cuando se votará por intendente.

En Hacemos por Córdoba también buscaron un acercamiento con Lucas Balian, de VamosCBA!, que considera que hay que buscar una solución a la situación de esos barrios. Pero el expresidente de la bancada radical durante la gestión de Ramón Mestre no vería con agrado que se aprobara en año electoral.

LUCAS BALIAN. (Prensa Concejo Deliberante).
LUCAS BALIAN. (Prensa Concejo Deliberante).
Así las cosas, al oficialismo le quedan estas posibilidades: producir los cambios ya anunciados, y votarlo en soledad en el recinto; que el debate sea después de las elecciones a intendente (que serían, según altas fuentes municipales, el último fin de semana de junio); o que el proyecto ni siquiera se debata este año.

Sobre la primera posibilidad, es difícil que se produzca. Porque también hay reparos a la propuesta dentro del propio Ejecutivo municipal, en la Secretaría de Desarrollo Urbano.

La segunda opción dependerá de los resultados electorales y de la voluntad de la oposición.

Y la tercera, que es la más probable, implicaría que una nueva conformación del Concejo Deliberante, que asumirá en diciembre, decida si afronta o no este debate.

Mientras tanto, se mantendrá el status quo: decenas de barrios seguirán siendo cerrados, pese a que la ordenanza 8.060 dice que tienen que ser abiertos, mientras las autoridades municipales siguen mirando para otro lado

Diego Marconetti – La Voz del Interior