Guillermo Montenegro, intendente de General Pueyrredon.
El intendente hace como que no oye o que no entiende nada cuando le preguntan cómo andan las encuestas. Pero en el círculo de sus colaboradores florecen las sonrisas cuando se habla del tema, ratificando de hecho que los números son más que halagüeños. Alguien, finalmente, se atrevió a brindar el gran dato, previo compromiso de no revelar la identidad del vocero oficioso.
Las cifras se comentan en los planos provincial y nacional, habida cuenta de que la compulsa ratifica que la política de proteger el supremo valor de la vida, suma amplia diferencia respecto de quienes presionan para terminar con la cuarentena. No sólo este ítem aporta gran respaldo a la posición, en este tema, de Guillermo Montenegro sino que ratifica, lo que se advierte en la política nacional y aún con mayores diferencias en Mar del Plata.
Un 90 por ciento de la consulta llevada a cabo por profesionales revela el categórico apoyo a la decisión del Ejecutivo municipal de combatir la epidemia del Covid-19. También es muy amplia la mayoría que, seguramente influenciada por el otro rubro, concede un 80 por ciento de sus preferencias a la imagen del jefe comunal. Tal vez con datos de este tipo a la vista no existe, prácticamente, oposición ni reclamos de peso a la actual gestión. Por otra parte, con algunas decenas menos, trabajadas con diversos enfoques, en el orden nacional y con Alberto Fernández a la cabeza, la aprobación surge nítida en las mediciones.
Se aguardan decisiones
Anoche había expectativas en la sede del gobierno municipal sobre la decisión del Ejecutivo que preside Alex Kicillof respecto de la respuesta favorable a solicitudes que amplíen la posibilidad de ejercer el comercio, negocios y actividades diversas. Algunas de ellas, según la comuna, estarían encuadradas en las exigencias dispuestas por el Gobierno nacional y los protocolos requeridos. Lo peculiar es que se requiere en diversos casos que es el gobierno de Buenos Aires quien tiene la autoridad final.
Hasta los más optimistas se niegan a arriesgar que una explotación central para los intereses marplatenses como la gastronómica y la hotelera, sea beneficiada en estas horas. Fenómenos como los de Necochea y de Olavarría con comunidades irresponsables engendraron renacimiento del virus que obligaron a un retroceso de las prerrogativas ya logradas podrían provocar que Kicillof agudice su severidad.
Las especulaciones destacaban como otro dato negativo para la ansiedad marplatense, nuevas declaraciones del ministro de Salud Ginés González García, señalando que el pico de la pandemia se esperaría para dentro de tres semanas. En la Municipalidad algunos entendidos afirman que se necesitan 21 días sin contagios para estar en condiciones para reclamar decisiones. Algunos recuerdan cuántos meses se ha hablado de “la imposibilidad de que Montenegro pueda pagar los sueldos y otra vez volvió a abonar los sueldos, religiosamente”.
Preocupación del senador
La semana pasada quedó, en este espacio, adelantado un tema que comenzó a exponer el senador de Juntos para el Cambio, Lucas Fiorini, referente al eventual abuso de fondos estatales para la compra de un medicamento abortivo. Dos presentaciones realizó ante el ministro de Salud de la provincia por la compra a través del Ministerio de 80 mil unidades del Misoprostol, el remedio en cuestión, por 15 millones de pesos, cuando que en el año anterior sólo se habían comprado 300 pastillas. Fiorini dice que “el gasto por la cantidad es excesiva como el monto empleado.” Y puntualizó que “que por protocolo de interrupción legal del embarazo, el ILE, hubo menos de 300 en la provincia, es como para preguntar por qué se adquieren 80 mil dosis”. Consideró también que “es excesiva por el contexto en que se hace un gran esfuerzo por el Covid-19 como para que la compra sea tan generosa con los recursos para gastarlos el día después”.
La comparación siguiente es significativa “con 15 millones de pesos se podrían comprar 150 respiradores Neumovent”. Y se quejó de no haber tenido aún ninguna repuesta del ministerio de Gollán.
Quejas barriales
La multiplicidad de actividades y de operaciones que requiere el control del cumplimiento de la cuarentena no deja demasiado margen para otras obligaciones del gobierno y del servicio de la seguridad.
Precisamente esta última es la que mayor atención reclama en diversos barrios que se quejan a través de la prensa. Vecinos de “Los Tilos”, en la prolongación del “Florida”, multiplica los reclamos en estos días por la increíble seguidilla de asaltos que vienen sufriendo vecinos y comerciantes de la zona en horas de la madrugada, debido a la falta total rondines policiales.
Y son decenas de barrios aledaños los que están sufriendo el azote, como si la vigilancia hubiese bajado los brazos.
Mañana el vecindario de Batán y de Polola tiene prevista, a las 11 una movilización en la Ruta 88 Km 19,5 y Calle 30, para exigir que se corra el retén al límite del Partido, porque evidentemente en su ubicación actual imposibilita la circulación de vecinos rurales
por Gerardo Gómez Muñoz – La Capital de Mar del Plata.