Nuevos paradigmas de la responsabilidad social y la sustentabilidad

Según un especialista del IARSE, ahora las empresas deben comunicar sobre su impacto ambiental.

En el marco de los 60 años de su aniversario que cumplirá el septiembre próximo, el Sanatorio Pasteur organizó días pasados una charla sobre la “Responsabilidad Social en tiempos de crisis” y contó con la presencia del Instituto de Responsabilidad Social Empresaria (IARSE).

El director de Administración del IARSE, Federico Zárate, analizó los cambios de paradigmas que hubo en las personas, empresas y organizaciones. “Hace unos años los conceptos vienen evolucionando y tienen que ver más allá que el cumplimiento de la ley”, sostuvo y en este sentido explicó que la responsabilidad social “se relaciona con lo que hacemos día a día como personas, con las organizaciones y con las sociedades, donde cada uno de nosotros toma decisiones que tienen un impacto en uno mismo, en los demás y en el planeta”.

Explicó que la responsabilidad social y la sustentabilidad “trae como desafío demostrar el valor que creamos en el día a día más allá de la ley, no solo se habla de lo económico, sino lo ético-cultural, social y ambiental. El desafío más grande es comunicar la creación de valores en tiempos de crisis”.

Zárate comentó que la responsabilidad social y sustentabilidad se practica desde un emprendedor, ONG, PyME o una gran empresa. En provincias como Catamarca o La Rioja existen pequeñas empresas que tienen buenas prácticas de responsabilidad social a través de sus colaboradores, clientes y consumidores que crean mucho más que valores económicos.

Al respecto, explicó que a un productor vitivinícola que pretende exportar su producción le consultarán no solo sobre la calidad del vino, sino también por el impacto ambiental de la fabricación de la botella, y para ello “es importante aprender a comunicar estas acciones, es decir, quieren saber cómo elaboras tu vino, bajo qué buenas prácticas y estándares y si tienes cuidado del medio ambiente”.

El comportamiento de los consumidores y el rol que juegan las empresas, fue materia de análisis de Zárate, quien indicó que “hay que concientizarlos (a consumidores), para que aprendan a comprar”, y en ese punto explicó que si “consumimos yerba mate somos cómplices del trabajo infantil por acto u omisión, porque compramos yerba y no sabemos de dónde vine”. Por ello exhortó a reflexionar acerca de que “debemos aprender más a preguntar e indagar, pero desde las organizaciones tienen que aprender a rendir cuentas, aunque no estemos acostumbrados y el mayor desafío de la responsabilidad social y la sustentabilidad es la medición de todo el impacto que creamos desde lo ético-cultural, lo económico, social y ambiental”.

– El Ancasti